Le ha pasado de todo a la selección mexicana con lesionados y reclamos
La Copa Oro se ha convertido en una verdadera tortura para la selección mexicana de Gerardo Martino.
Aún no comenzaba y el tema de Javier Hernández estaba en boca de todos, al no ser convocado y sí Rogelio Funes Mori, como recién naturalizado mexicano. Otra mala noticia se dio con la lesión de Andrés Guardado, quien causó baja del tri, previo al torneo.
Por si fuera poco, el primer partido frente a Trinidad y Tobago fue un verdadero suplicio para el conjunto del Tata, con el empate sin goles, los actos racistas que reclaman los trinitarios por el grito discriminatorio que detuvo el juego en un par de ocasiones, el trabajo arbitral de Ricardo Montero con el que no quedaron conformes los aztecas y, lo peor de todo, el escalofriante golpe que se llevó Hirving Lozano, tras chocar con el portero caribeño Marvin Phillip y que lo dejó fuera de la Copa Oro.
La baja de Andrés Guardado
Mal empezó el camino del tri hacia la Copa Oro, al causar baja Andrés Guardado, quien sufrió una lesión muscular grado II del bíceps femoral izquierdo, con un tiempo estimado de recuperación de entre cuatro y seis semanas, por lo que ya no entró en la convocatoria de Martino.
La ausencia del ‘Principito’ resultó un golpe muy duro para el equipo, al ser el capitán y uno de los hombres de experiencia en la cancha.
La polémica
La buena racha goleadora con la que Javier Hernández arrancó la Major League Soccer hizo pensar a muchos que el Chicharito podría estar de regreso en la selección mexicana, pero la respuesta es ‘no’, el Tata no lo quiere y no lo llamó.
En contraparte la polémica se hizo más grande con el llamado de Rogelio Funes Mori, el argentino naturalizado mexicano, a quienes muchos ven con buenos ojos y otros no.
El empate sin goles
Los temas extra cancha se adueñaron de los encabezados sin que la Copa Oro aún comenzara y con silbatazo inicial se agudizaron los problemas.
México enfrentó a Trinidad y Tobago, quien se clasificó al evento tres días antes de su debut, y simplemente no pudo. Creó algunas oportunidades y en todas las falló, encontrándose al portero Marvin Philip bajo los tres postes.
Un gol de Funes Mori, en la agonía del juego, hizo estallar a la tribuna, pero el árbitro lo anuló por un fuera de lugar de Jesús Gallardo. El silbante ni siquiera acudió al VAR.