Me parece que hay una manzana podrida que puede terminar por aniquilar la posibilidad de diálogo y coordinación de trabajo que debería existir, siendo sensatos, entre el Gobierno del Estado y la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.
Lo podrido agusana todo lo que toca.
Ese es el tramposo Mario Mendivil Blanco, el voraz empresario que vendió en 25 MILLONES DE DÓLARES al equipo Lobos BUAP sin ser suyo, caso que debería estar en manos de la Unidad de Inteligencia Financiera que preside Santiago Nieto, independientemente de las autoridades jurídicas conducentes, empezando por la Fiscalía General que encabeza Gilberto Higuera.
Y si no es él, ¿cuáles son los motivos reales que han originado esa rivalidad entre el Gobernador Miguel Barbosa y el Rector Alfonso Esparza?
¿Venganzas, rencores, animadversiones gratuitas, ideologías, lucha de grupos, ambiciones?
No quiero imaginar que esto sea, aunque en política se puede esperar cualquier cosa.
Estimo y respeto a Miguel Barbosa y Alfonso Esparza. Mi deseo es que las cosas vayan bien para el Gobierno y la BUAP. Bueno, es mi punto de vista que en nada influye. Ellos sabrán sus límites y cómo resuelven sus asuntos.
Pero, ¿qué hace que el pillo Mendivil diga que habló con quien tenía hablar y que nada le obligará a pagar a la BUAP lo que debe por la venta del equipo Lobos, exigiendo que la institución admita los 90 millones que depositó en el Juzgado Tercero de lo Civil, porque no sacará de su bolsa los otros 180 que adeuda de acuerdo a documentos oficiales?
Además, está seguro que nadie lo llamará a cuentas por el fraude a la institución, a pesar de que ya perdió la primera instancia en el litigio. Quizá lo envalentonan su Abogado Javier Cuello Trejo, también defensor de Emilio Lozoya, defraudador millonario de PEMEX y sus conectes políticos que presume.
¿Por qué su seguridad de que no habrá investigación seria y profunda, implorando que la ley se tuerza?
En esto tienen que ver Enrique Bonilla, el corrupto Presidente de la Liga de Fútbol MX; el socio de Mendivil en Garden Teas, Antonio Álvarez López y Televisa, avales de los trinquetes de Mendivil Blanco.
Nunca, Mendivil, ha sido dueño del Certificado de Afiliación de Lobos a la Federación Mexicana de Fútbol. La propiedad es de la BUAP, que nunca cedió los derechos ni los arrendó ni los traspasó, como dicta el Artículo 34 del reglamento de la FEMEXFUT, como para que el pillo se dijera dueño de la franquicia y venderla a la empresaria Alejandra de la Vega para ascender, sin merecerlo, a Ciudad Juárez, haciendo a un lado a los Cafetaleros de Tapachula, constituyendo uno de los motivos de la molestia del ex Gobernador de Chiapas, Manuel Velasco, para romper con el PRI y llevar a la derrota a Roberto Albores en la elección de 2018.
Si hay justicia como debe ser, sin sesgos, Mendivil Blanco y su empresa Garden Teas tendrá que ser sancionado, porque no sólo hizo el gran negocio con la venta ilegal de Lobos, sino que demandó a Esparza, filtró documentos con información falsa a Periodistas nacionales, amenazó a la Abogada General de la institución y a Luz Andrea Esparza, hija de Alfonso, quien también ya es investigada.
¿Dónde quedaron las declaraciones de Barbosa y Esparza hechas durante la campaña por la gubernatura y luego de los comicios extraordinarios de 2019?
HAY QUE RECORDARLAS: Faltaban unos días para las elecciones. El candidato por MORENA, PT y PVEM, Miguel Barbosa Huerta arribó al Carolino; fue recibido por el Rector Alfonso Esparza Ortiz, quien se mantuvo cercano escuchando sus propuestas. Las encuestas marcaban la delantera del ex Senador, aunque faltaba el día clave, el de la votación en un ambiente tenso.
Ante el Consejo Universitario, Barbosa, dijo: “Es la gran oportunidad para devolverle a Puebla la normalidad política, democrática, social y económica, a fin de generar condiciones mediante las cuales se transforme el poder público. Garantizo una sociedad de libertades donde no prive el miedo al gobernante como ocurrió en el pasado reciente”.
“Nunca más el poder será utilizado para la venganza o para hacer el mal; la política y los políticos deben dignificarse”. Esta fue una de las ideas que gustó entre los universitarios y fue recogida con entusiasmo.
“Se mantendrá diálogo permanente con la Rectoría de la BUAP a fin de abordar todos los programas de la Universidad y poder asegurar los recursos necesarios que nunca más faltarán”, fue el ofrecimiento.
Ganó Miguel Barbosa, luego de una elección apretada que el PAN impugnaría.
Su triunfo fue ratificado, pero antes de esto, el Rector Esparza Ortiz ya había preparado la petición de reunirse con el Gobernador Electo. La BUAP fue de las instituciones que reconoció sin tapujos su victoria y señalaría: “Aún no hay fecha del encuentro con el próximo Gobernador, pero se buscará que se ajusten las agendas para plantearle esa parte de poder trabajar de manera coordinada proyectos en conjunto y generar apoyos para que la Universidad siga el crecimiento al interior del Estado, sobre todo crecer en la matrícula y tener mayor oferta, así como temas de seguridad y todo lo que tenga que ver con la institución”.
“Se le planteará a Miguel Barbosa un trabajo conjunto entre la máxima casa de estudios y la administración estatal”, enfatizaría.
¿Qué pasó?
¿Por qué todo quedó trunco?
¿Cuáles son las causas verdaderas del choque abierto?
Los discursos y declaraciones alentadoras andan volando.
Que se diga qué pasó. La sociedad quiere saberlo.
Si hay algún asunto que esté oculto, que se abra y si existen acusaciones fundamentadas, que se demuestren, porque el escenario gélido y de discordia es peligroso y a nadie conviene.
No vale la pena Mario Mendivil Blanco, el mercader que ganó muchos millones vendiendo a Lobos de la BUAP. Él, es uno de los que combatió a López Obrador, inyectando recursos y organizando eventos a favor de José Antonio Meade.
En lo personal insisto en el diálogo y la negociación política dentro de los cauces legales.
Es mi opinión sencilla que, por supuesto, no influye en la decisión e intereses de Miguel Barbosa y Alfonso Esparza. Ya están grandecitos.
directorabcd_reflexiones@yahoo.com.mx