No ha pasado desapercibido el estrecho vínculo que existe entre el Presidente Andrés Manuel López Obrador y el Gobernador de Puebla Miguel Barbosa Huerta.
Su cercanía ha causado envidias, no sólo porque queda asentado que ambos personajes navegan en el mismo barco que combate frontalmente la corrupción e impunidad, llevando consigo la convicción permanente, a prueba de todo, de consolidar la tan difundida Cuarta Transformación y no retroceder ante los embates que a diario reciben de sus adversarios que los quisieran ver caídos limpiando el piso del fracaso.
El Presidente estuvo en Puebla cuando Miguel ganó los comicios; posteriormente visitó municipios de la sierra y un día antes de su primer informe vino a estrechar la mano del Gobernador y reafirmar ante la audiencia, que le coreó cada frase, no bajar la guardia para derrotar a la turba de rapaces.
Barbosa, reiteraría que el ejemplo a seguir es López Obrador y 24 horas después escuchaba en Palacio Nacional el mensaje que refrendaba la política de anticorrupción y austeridad.
Ayer, el mandatario poblano fue recibido por López Obrador justo en las oficinas del Palacio Nacional. Únicamente ellos saben de qué hablaron, pero es significativa la fotografía que se tomaron teniendo de fondo una bella pintura que sintetiza en la memoria la Batalla de Puebla de 1862, que enarbola la valentía, el nacionalismo, la libertad y la conciencia mexicana, frente a las castas dominantes del más puro conservadurismo que ahora pretende reagruparse después del desastre que vivieron en la elección de 2018.
El Presidente López Obrador, enfrenta a los grupos que detentaron el poder y se niegan a soltarlo.
El Gobernador Barbosa, transita por una ruta igualmente peligrosa.
Vislumbrar lo que puede venir y estrechar las alianzas a prueba de ácido, los hará fuertes.
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SIEMPRE HE catalogado a Manuel Bartlett Díaz como un formidable político.
Hizo bien las cosas como Gobernador de Puebla.
La aprobación de la mayoría ciudadana se hizo manifiesta, apenas ensuciada por el PAN que siempre lo ha odiado.
Un grupo de Periodistas locales lo denuestan hasta la fecha. Casualmente aquellos que fueron serviles al morenovallismo
Algunos más a nivel nacional le siguen los pasos, coincidiendo en que son los mismos que nunca criticaron al PAN de Ricardo Anaya y Diego Fernández de Cevallos ni mucho menos fueron capaces de aludir a Rafael Moreno Valle y Antonio Gali Fayad en sus tropelías que se empiezan a descubrir escandalosamente.
Igualmente festinaron el triunfo de Martha Erika Alonso y destrozaron la imagen de López Obrador y Miguel Barbosa.
Hoy, Bartlett, es investigado por la Auditoría de la Función Pública, luego de recibir una “denuncia anónima”; mientras que la Senadora Xóchitl Gálvez, distinguida por su florido lenguaje y, para variar, panista de hueso colorado, ha pedido a la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda, se investiguen las cuentas bancarias del ahora Director de la CFE.
Con la presunción de inocencia, Manuel Bartlett se defiende de los tiradores que son muchos. Ha recibido el respaldo y apoyo del Presidente, le toca responder con pruebas y el carácter que lo han distinguido a lo largo de su larga trayectoria.