Luis Enrique Quintero
Un vecino del fraccionamiento Los Molinos, ubicado al sur de la ciudad, falleció la noche de este domingo a causa de las lesiones que sufrió al caer de un cuarto piso, al parecer bajo los influjos de alguna droga y luego de una discusión con su mujer. Los residentes responsabilizan de esta muerte a policías municipales que intervinieron, por su incapacidad y prepotencia.
La escalofriante historia comenzó a escribirse después de las 11 de la noche de este domingo, en el departamento 401 Edificio 101, privada Lienzos del complejo habitacional Ivi-hogar Los Molinos, en bulevar Carmelitas y calle casuarinas.
Los condóminos relatan que comenzaron a escuchar gritos de auxilio de parte del vecino del 401, mediante los que señalaba que alguien pretendía entrar a su vivienda para asesinarlo. En el interior del inmueble se encontraban su esposa y su pequeño hijo de 6 años de edad.
Poco a poco se fue descubriendo que esas amenazas de muerte sólo existían en la cabeza del citado sujeto quien evidentemente estaba muy drogado pues luego rompió los cristales de su puerta y ventanas con aparentes intenciones de arrojarse al vacío.
Al lugar de los hechos, ya durante la madrugada, arribaron elementos de la policía municipal (patrullas 800, 820, 824 y 826) para someter al individuo, pero los uniformados tardaron mucho en subir al referido departamento y cuando lo hicieron el vecino ya se había descolgado a la ventana del departamento 301 en donde no pudieron alcanzarlo y si, en cambio, lo atemorizaron hasta que perdió el equilibrio y cayó al piso donde pereció en cuestión de segundos.