Previo a cada elección los acuerdos entre políticos fluyen en cascada.
Por supuesto que hay pactos de hombría donde la dignidad y la palabra valen.
No faltan las traiciones, producto de la ambición desmedida o la compra de conciencias.
Se especula de cada reunión que “secretamente” organizan los políticos, creyendo que la plática quedará resguardada bajo siete llaves; se arman cuentos chinos, pero también hay muchas verdades que fluyen.
No hay rincón del país que esté libre del fenómeno.
Se está viendo en Puebla, para ser concretos, en la lucha por las candidaturas rumbo a 2024.
Casa Aguayo es el manjar, mientras el Gobernador Miguel Barbosa está centrado en entregar buenos resultados, sin descuidar, por supuesto, la carrera del relevo. Su voto de calidad cuenta.
Los momios hacen sus apuestas más allá del Partido, pues las figuras con trayectoria, preparación y méritos jugarán el rol protagónico.
Lo señalé desde hace tiempo y sostengo que, Alejandro Armenta Mier, será candidato y tiene amplias posibilidades de triunfar, no sólo por las cualidades advertidas, sino porque es dueño de una estructura operativa poderosa. 8 de cada 10 poblanos lo conocen y la intención de voto a su favor supera las expectativas. Su carrera y proyección rebasa, incluso, el ámbito estatal, siendo uno de los legisladores en el Senado más activos con presentación y defensa de iniciativas que han impactado, como es el control y explotación del litio por parte del Estado mexicano, el cuidado del medio ambiente, disminuir el consumo de alimentos chatarra y el cuidado a la familia en la dotación de obras de amplio impacto social que disminuyan las carencias remarcadas en los últimos tiempos, por citar ejemplos palpables.
Le sigue Eduardo Rivera Pérez, el Alcalde que busca sacarse la espina después de un trienio para el olvido, el de 2011-2014, marcado por su entreguismo al morenovallismo, a tal grado que se dejó pisotear. Los platos rotos los pagó la ciudadanía.
Ahora, nuevamente la pavimentación de calles parece ser su mejor propuesta, opacada por la instalación de parquímetros que, aseguran los que saben, le dejarán millones de pesos en ingresos para utilizarlos en su campaña política. Es decir, la Presidencia Municipal le servirá de trampolín y los resultados de la gestión pasan a último término. No pasa desapercibido que los Presidentes Municipales panistas y algunos priistas se le están entregando a través de la presión y compromiso con la líder panista Augusta Díaz de Rivera.
No podía faltar el impresentable Diputado federal Ignacio Mier Velazco, marcado por su protección a delincuentes, fracasos camerales, nunca haber ganado una elección en las urnas y porque es un perfecto desconocido en casi todo el territorio poblano. Por cierto, sigue al frente, con sus compinches embozados, del desprestigiado periódico Cambio, donde es juez y parte, dictando golpear a sus enemigos y ordenando distinguir sus atributos personales.
Hay quienes aseguran que Mier Velazco es un político difunto, pero no se ha dado cuenta.
Sin duda, saltarán otras figuras con derecho de apuntarse en la puja. ¡Bienvenidos!
Insoslayable la pelea por la Presidencia Municipal de Puebla, precisamente en manos de Lalo Rivera. Si el Alcalde viera que sus posibilidades son escasas, podría aferrarse a la reelección, viniendo de atrás la misma Claudia Rivera Vivanco, a pesar de su administración para el olvido; Jorge Estefan Chidiac, el Diputado local que tiene presencia en la capital, si es que renuncia a su ilusión de ser Gobernador en 2024, sin descartar la sorpresa que puede llegar de la Secretaría del Trabajo o del Tribunal Superior de Justicia.
Mire usted: Los “sabuesos” políticos con un olfato envidiable, juran que recientemente se reunieron Gabriel Biestro Medinilla y Héctor Sánchez Sánchez, sellando el acuerdo de “si yo soy, me apoyas; si eres tú, te apoyo”, en referencia a la Alcaldía de la capital. No quedó claro con quien irían en mancuerna. Lo que sí se sabe es que, el Presidente del Tribunal Superior de Justicia, buscó acercarse sin éxito a Ignacio Mier Velazco.
Gabriel Biestro, después de algunos traspiés, reapareció en la Secretaría del Trabajo en lugar de Abelardo Cuellar Delgado, el “experto” universitario de la BUAP en materia laboral que tiene que responder por actos de alta corrupción que ha querido limpiar sin éxito.
Por lo mientras, Héctor Sánchez, trata de poner orden entre algunos Jueces y Magistrados pillados en actos fuera de la ley, sin que eso le quite las ganas de hacer carrera política.
La mesa está puesta, a pesar de que falta tiempo para la definición de candidatos, pero no mucho.
POSDATA: Néstor Camarillo, el títere Presidente del CDE del PRI, ha recibido la instrucción de atacar al Senador Alejandro Armenta, asegurando que está reclutando priistas para que se sumen a MORENA.
Creo que Néstor ignora que cada quien va a donde quiere ir.
Mejor debería aclarar cómo es que llegó al liderazgo priista sin tener preparación, sin el consentimiento de las bases ni de los consejeros. La respuesta es simple y no se atreve a decirlo: Fue propuesto por Ignacio Mier Velazco (MORENA) y el Doctor Enrique Doger Guerrero (PRI), aceptando Alejandro Moreno Cárdenas.
Lo escribí días antes de que Néstor rindiera protesta, con el consentimiento de su papá Isidro Camarillo, mi amigo que en paz descanse. Hoy, nada más lo ratifico. “Todo está planchado; ya dio el sí Doger y está de acuerdo Nacho Mier”, me dijo, mientras chocábamos el vaso jaibolero después de una partida de dominó.
Por supuesto que Mier Velazco no se fue a meter al CEN del PRI, siguió la jugada con unos catalejos morenos.
POSDATA 2: ¿Quién de los aspirantes a Presidente Municipal de Puebla tiene contratados a 4 despachos jurídicos por si las moscas? Dicen que uno de ellos es el del Doctor Porfirio Ramírez Mendoza, conocido como “El Midas del Derecho”, quien tuvo una excelente relación con Antonio Gali Fayad cuando era Gobernador, lazo que no se rompió.