La consultora Integralia asegura que los riesgos más grandes son: mala estrategia de vacunación y choque con el INE.
El factor de riesgo más importante para el entorno de negocios y la gobernabilidad del país, de cara al proceso electoral de junio, en el que se renovará la Cámara de Diputados y 15 gubernaturas, se llama Andrés Manuel López Obrador, alertó el director general de Integralia Consultores, Luis Carlos Ugalde.
Con base en el análisis “Diez riesgos políticos para 2021”, realizado por Integralia, el analista destacó, en conversación con EL FINANCIERO, que tanto las fallas del gobierno en la contención y vacunación contra el COVID-19, como la estrategia desafiante del mandatario frente al Instituto Nacional Electoral (INE) representan un nivel de riesgo “muy alto”, lo cual no sólo prolongará la contingencia sanitaria, sino, además, polarizará las campañas y generará conflictos poselectorales.
De acuerdo con el reporte, en los dos primeros años de esta administración han aumentado los niveles de riesgo a un nivel “alto” en la concentración de poder, incertidumbre jurídica, ineficacia gubernamental y deterioro económico, lo cual impactará de forma adversa en la expectativa de retorno de inversionistas, la rentabilidad de empresas y la estabilidad democrática.
“El Tribunal Electoral, que muchos ven como una organización capturada por el gobierno, tendrá que tomar una decisión, pero, eventualmente, llegará a un desgaste muy pronunciado, y esto puede llevar a que muchos gobernadores y alcaldes empiecen también a entrometerse en las elecciones y esto puede salirse de control”, dijo.
“Por eso lo vemos como un elemento que va a llevar a una elección y a unas campañas muy polarizadas. Creemos que el Presidente va a seguir sugiriendo que el INE es muy caro y puede cometerles fraude a los candidatos de Morena. Un poco en el tono que hizo Donald Trump en Estados Unidos”, agregó.
Para el expresidente del Instituto Federal Electoral –actual INE–, es previsible que Morena pierda la mayoría calificada en la Cámara de Diputados y sólo alcance una mayoría absoluta, es decir, 250 diputaciones más uno, lo cual le quitaría al Presidente la capacidad para modificar la Constitución, es decir, no tendría los votos para desaparecer los órganos autónomos. “En Integralia prevemos que Morena va a perder la mayoría calificada. ¿Por cuánto? No lo sabemos. Pero se puede construir un segundo bloque de contención en la Cámara de Diputados que, por cierto, podría reforzar al bloque de contención desgastado del Senado”, anticipó.
Lo anterior, agregó, podría llevar a un escenario de confrontación y choque entre el Ejecutivo y el Legislativo, lo cual podría derivar en acusaciones al Congreso de obstrucción y la tentación de que el Presidente busque gobernar mediante consultas, “que trate de saltarse el Congreso, simplemente, y decir ‘el pueblo y yo vamos a gobernar; y voy a consultar si quieren que desaparezcamos los (diputados) plurinominales; y quiero preguntarle al pueblo si quiere que desaparezcamos al INE’, entonces va utilizar eso como un instrumento de presión política para que el Congreso haga lo que él busca”.
De acuerdo con Luis Carlos Ugalde, existe la preocupación de que el Tribunal Electoral ha tomado decisiones con base en una presión desde Presidencia, lo cual conduciría una elección muy conflictiva.