Tomado de El Sol de Parral
Ricardo Holguín
26 de febrero de 2020
“Él salía del domicilio en bicicleta o a pie, es un hombre de estilo norteamericano, delgado, de alrededor de 60 años de edad, siempre traía animales al domicilio y en una ocasión lo vimos comerse la carne de los mismos” refirió una señora que habita a unos metros de esta propiedad quien dijo haber escuchado y visto la forma en que los trataba.
“Por las noches se escuchaban los perros llorar, como si los golpeaban y empezaban a ladrar de forma alterada, el venia de vez en cuando a ese lugar, a veces cargaba hieleras o bolsas, no sabemos que llevaba pero parece que eran los cuerpos de los animales” comentaron vecinos que denunciaron a quien nombraron “El Mataperros”.
En una propiedad aparentemente abandonada, ubicada en la ampliación crucero a algunos metros de la Puerta Chihuahua, es donde una persona quien permanece prófuga, recolectaba perros callejeros a los cuales maltrataba, asesinaba con cuchillos y en ocasiones se los comía, según los indicios, restos y evidencias que se recuperaron del interior.
Por lo menos 100 canes se encontraron en la propiedad, 30 de ellos fueron asegurados con vida, 20 sin vida y el resto se encontraban destazados o ya los últimos restos en huesos que fueron localizados al interior de la propiedad y que se encuentran analizados por las autoridades para determinar su muerte.
En el exterior, el lugar huele a animal muerto, en su entornó, existen decenas de botes de agua, etiquetas de café, restos de perros y basura en general, que este individuo tiraba de forma constante. Al interior de la propiedad, era prácticamente un “cementerio de huesos” de perros, además que fue donde resguardaron a los 30 animales que serían asesinados por el indigente.
Más de una centena de huesos permanecen al interior, hay utensilios que el hombre utilizaba para asesinar a los animales, comúnmente los cortaba a la mitad, los dejaba en los huesos y su carne se la arrancaba de los huesos, según la evidencia que recuperaron los elementos de seguridad y personal de ecología del municipio de Chihuahua.
Personas dicen que se los comía, pero no descartan la posibilidad de que pueda venderlos a alguna persona para el consumo humano, sin embargo no se han determinado el motivo por el cual los asesinaba y solo existe el hecho verídico que los mataba en dos o tres días después de que los capturaba.
Los vecinos quienes decidieron reservar su identidad, comentan que el hombre no es el propietario del lugar, aparecer ubico este espacio y decidió ingresar a este domicilio, luego de habitar por más de cinco meses la propiedad, estuvo recolectando animales en diversas ocasiones según lo captaron las veces que lo lograron ver.
“Él salía del domicilio en bicicleta o a pie, es un hombre de estilo norteamericano, delgado, de alrededor de 60 años de edad, siempre traía animales al domicilio y en una ocasión lo vimos comerse la carne de los mismos” refirió una señora que habita a unos metros de esta propiedad quien dijo haber escuchado y visto la forma en que los trataba.
La ubicación de este “matadero de perros” se dio gracias a la denuncia ciudadana de un vecino, quien insistentemente pedía la intervención de las autoridades, hasta que el pasado lunes le tomaron la palabra y acudieron al lugar para revisar los hechos, sin embargo, no lograron ubicar al responsable de cometer los hechos.
Personal de seguridad, aseguraron varios artefactos que el hombre utilizaba para asesinar a los canes, también encontraron varios libros en el idioma inglés, que confirma el origen del individuo que habita a su interior, pues incluso tenía un libro titulado, “The Kill Room” de Jeffery Deaver, que habla sobre la exploración de asesinatos selectivos.
La propiedad cuenta con un terreno que era utilizado por los dueños del lugar como un espacio recreativo, incluso al medio cuenta con una piscina, mientras que al fondo, existe una vivienda abandonada de tres cuartos donde se encuentran desperdicios de animales, huesos y basura en general, que destacan de un espacio que se encuentra deshabitado desde hace varios meses.
Los vecinos se encuentran unidos para poder detectar a “el mataperros” pues temen que después pueda atentar contra los menores o diversas personas, por lo que realizan rondines en el lugar, a fin de poder garantizar la paz de este sector, donde se encuentra con poca presencia policía, si es que casi nula.
Agentes de la Policía Municipal, personal de municipio de Chihuahua, acudieron el lunes a este domicilio, ahí aseguraron alrededor de 20 cuerpos sin vida de perros de diversos tamaños y los 30 animales que seguían vivos, los cuales fueron llevados a las inmediaciones del Centro Antirrábico, donde permanecerán en adopción.
El responsable de los hechos, no ha sido identificado, al parecer es una persona indigente, que encontró este lugar abandonado y que decidió ingresar de forma clandestina a los mismos, por lo cual acudía de dos a tres días a la semana y comenzó a recabar decenas de perros que presuntamente se comía o vendía su carne para el consumo humano.