El Bayern de Múnich asestó un gran golpe al vencer al Chelsea por 3 a 0 en Stamford Bridge, este martes en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones, con lo que queda en una situación muy favorable antes de la vuelta del miércoles 18 de marzo.
El internacional alemán Serge Gnabry fue decisivo en el inicio de la segunda parte con un doblete (minutos 51 y 54) logrado con asistencias de Robert Lewandowski, que logró luego el tercero (76).
El astro polaco queda de nuevo al frente en solitario en la tabla de goleadores del torneo, con 11 dianas, después de que el noruego Erling Haaland (Borussia Dortmund, ex del Salzburgo) le alcanzara a 10 la pasada semana con su doblete al París Saint-Germain.
“Robert me ha brindado dos goles que podría haber marcado él mismo. ¡Puedo darle el trofeo! (de mejor jugador del partido)”, declaró Gnabry justo al término del encuentro en Londres.
El Chelsea acabó además con un hombre menos, por la expulsión del español Marcos Alonso en el 84.
“Es un muy buen resultado. El equipo ha hecho durante los noventa minutos un partido con mucha concentración y determinación”, celebró el técnico de los muniqueses, Hansi Flick.
Con su amplio triunfo, el Bayern queda muy cerca de vengarse del equipo que le ganó la final de esta competición en 2012 en su estadio de Múnich.
El año pasado un equipo inglés, el Liverpool, había sido el verdugo del Bayern en los octavos de la máxima competición europea, por lo que el campeón de las siete últimas ediciones de la Bundesliga se sacaría también de manera indirecta la espina de aquella enorme decepción.
“El nivel del Bayern fue fantástico. No conseguimos aparecer. Estamos evidentemente decepcionados, ha sido una dura lección para los jugadores, pero así es el fútbol en la Liga de Campeones”, admitió el entrenador del Chelsea, Frank Lampard.
La mala noticia para el Bayern llegó en forma de lesión, la del francés Kingsley Coman, que fue cambiado en el minuto 66 con un problema muscular.
– Atareado Caballero –
En la primera parte, los dos equipos brindaron un duelo dinámico, con ocasiones especialmente para el Bayern, pero el duelo llegó al descanso con la igualdad a cero.
El primer aviso serio lo dio el Bayern en el minuto 11, con un balón de Thomas Müller para Coman, que desde la frontal envió un disparo que se perdió fuera, rozando el palo.
En el 15, el arquero argentino Willy Caballero sacó con el pecho un intento de Robert Lewandowski y Müller (29) rozó el tanto para los germanos, con un disparo con rosca que fue fuera por poco.
La primera del Chelsea la tuvo Olivier Giroud (34), que no llegó a rematar a gol por muy poco.
Müller (35) envió al larguero a centro de Lewandowski, antes de que Manuel Neuer impidiera que el Chelsea se adelantara en el 44, a disparo de Marcos Alonso.
En la segunda parte, Gnabry asestó dos zarpazos en apenas tres minutos, que dejaron herido casi de muerte al Chelsea.
Su primer gol (51) llegó con un remate en el área rodeado de rivales, aprovechando un pase de Lewandowski, que le dio también la asistencia que le permitió irse en carrera hacia el arco rival, entrar en el área y batir por bajo en el 54 a Caballero.
Gnabry rozó el ‘hat-trick’ con una volea en el 58, pero se fue alta.
El Chelsea no reaccionaba y el Bayern ahondó en la herida, cuando en el 76 el joven canadiense Alphonso Davies hizo una fulgurante carrera por la banda izquierda para enviar un pase de la muerte que Lewandowski empujó a la red.
Los jugadores del Bayern, Lewandowski incluido, fueron a abrazarse a Davies como si hubiera sido él el autor del tanto.
El marcador ya no se movió y el Chelsea necesitará una remontada épica en el Allianz Arena para poder dar la vuelta a la eliminatoria.
AFP