**Ignacio Mier, quien quiere ser Gobernador de
Puebla, lo protegió y ahora le busca relevo
Por: Rodrigo Santamaría
De acuerdo al Derecho Constitucional Mexicano que ha explorado en reiteradas ocasiones el objetivo del fuero del que se encuentran investidos los legisladores de la República, existen algunos principios que hay que tomar en cuenta para determinar el momento en que cesa el privilegio. De tal forma que, la regla general sigue vigente y es válida: Habrá privilegio si hay función. Cuando esta cesa por haber vencido el período legal, por destitución, renuncia o licencia, no hay privilegio. (Artículo 214, fracción II del Código Penal).
Bajo este contexto, el líder cameral de MORENA, Ignacio Mier Velasco, tendría razón al decir que los hechos con los que se relacionan a Saúl Huerta Corona, ocurrieron fuera de su función como Diputado federal, rechazando que su grupo parlamentario solicite su desafuero.
“Lo hizo en su vida personal”, afirmó Mier torpemente.
O sea, ¿la vida personal de Huerta Corona le permite ser acosador, violador y amenazar a sus víctimas? ¡Qué poca… sensibilidad de Nachito!, diría Porfirio Muñoz Ledo.
No puede ni debe ser tan trivial el también Presidente de la Junta de Coordinación Política en el Palacio de San Lázaro. Tampoco minimizar un asunto de suma gravedad que alcanza el grado de escándalo nacional y la reprobación unánime de los mexicanos.
Inverosímil tratar de cobijar a un depravado, Diputado o no, al que se la han juntado otras dos denuncias por el mismo delito, utilizando el mismo modus operandi.
Hasta el Presidente Andrés Manuel López Obrador ha calificado de indignante lo sucedido.
Saúl Huerta Corona, no tenía fuero al momento de ser detenido porque era, en ese momento, candidato con licencia que buscaba la reelección como candidato por MORENA en el distrito 11 de Puebla, pero lo presumió ilegalmente ante la Fiscalía General de la República y fue dejado en libertad.
¡Engañó y le creyeron!
Y también fue protegido con declaraciones irresponsables como la de Ignacio Mier, quien ahora evade abundar en el tema e intenta imponer a su pupilo Iván Galindo como relevo de Huerta Coronel, afianzando sus piezas en la lucha que vendrá en 2024 con una elección monumental que pondrá en juego el manejo político, económico y social del país.
Mier Velasco, quiere ser Gobernador de Puebla.
Las acusaciones, las grabaciones que se hicieron públicas y el intento de soborno en que incurrió Huerta Corona para tapar su delito, lo dejaron en un callejón sin salida. No obstante, se le permitió renunciar a su candidatura y regresar como si nada a la Cámara de Diputados para, entonces, sí, ampararse en el fuero, intentando evitar ser enjuiciado, sentenciado y encarcelado, proceso que ya es parte de su destino.
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