El estado general del jesuita argentino no ha tenido nuevas crisis, pero los médicos son mesurados en su optimismo
El Papa Francisco permanece hospitalizado en el Policlínico Gemelli de Roma, donde fue ingresado el pasado 14 de febrero debido a complicaciones en su salud. De acuerdo con el comunicado emitido la mañana de este 6 de marzo por la Sala de Prensa de la Santa Sede, el Pontífice pasó una noche tranquila y continúa en fase de recuperación.
Según los reportes médicos, el Papa ha retomado sus terapias, incluyendo fisioterapia motora activa para fortalecer su movilidad y prevenir complicaciones derivadas del reposo prolongado. Durante la noche recibió ventilación mecánica no invasiva, pero esta mañana volvió a la oxigenación de alto flujo mediante cánulas nasales, un procedimiento menos invasivo que ayuda a mantener una correcta oxigenación.
El boletín médico publicado en la tarde del 5 de marzo indicó que las condiciones generales del Pontífice son estables, sin que haya presentado episodios recientes de insuficiencia respiratoria. Además, el informe destacó que el Papa colabora con los tratamientos y mantiene un buen ánimo, lo que es una señal positiva en su recuperación.
Los especialistas han subrayado la ausencia de crisis respiratorias en los últimos dos días. No obstante, debido a la complejidad de su cuadro clínico, han decidido mantener la prognosis reservada y seguir monitoreándolo de cerca.
Con este 6 de marzo, el Papa Francisco ha cumplido 21 días hospitalizado en el centro médico romano. Aunque los reportes indican estabilidad, su evolución sigue bajo observación constante.