De ser confirmado, sería el primer latino en dirigir el Departamento de Salud y Servicios Humanos, una agencia con un presupuesto de 1.4 billones de dólares y con una amplia cartera de proyectos.
WASHINGTON, DC.- Xavier Becerra, designado por el presidente Joe Biden como secretario de Salud, afrontará dos días de audiencias conflictivas en el Senado. Los republicanos tachan al californiano de poco apto para el cargo, mientras que los demócratas acusan a los opositores de hacer política a pesar de la pandemia.
Becerra, ahora procurador general del estado más poblado del país, California, será interrogado por dos paneles legislativos. Las comisiones de Salud y Finanzas votarán si envían la candidatura de Becerra al pleno del Senado.
De ser confirmado, sería el primer latino en dirigir el Departamento de Salud y Servicios Humanos, una agencia con un presupuesto de 1.4 billones de dólares y con una amplia cartera de proyectos.
Becerra, de 63 años, representó a los vecindarios hispanos de Los Ángeles en la Cámara de Representantes durante más de 20 años antes de convertirse en el principal oficial de justicia de su estado, relevando a la vicepresidenta Kamala Harris.
Su política es de centroizquierda, pero su estilo es discreto y está orientado a la solución de problemas. Como congresista, desempeñó un papel tras bambalinas dirigiendo la ley de atención médica del presidente Barack Obama a través de las divisiones demócratas en la Cámara.
El lunes, los senadores John Kennedy de Louisiana y Tom Cotton de Arkansas publicaron una carta en la que le pidieron a Biden que retirara la nominación, calificando a Becerra de “no apto para ningún puesto de confianza pública”.
El líder de la minoría del Senado, Mitch McConnell, de Kentucky, lo llamó “partidista famoso”. El grupo político Heritage Action for America lanzó una campaña digital y por cable contra Becerra. Agencias