Los Periodistas al servicio del Rafael Moreno Valle nunca dijeron nada de sus excesos en la manipulación de Diputados que se reflejó en aberraciones legislativas de todo tipo, empezando por la aprobación relámpago de sus iniciativas conectadas con la otorgación de concesiones, privatizaciones de servicios públicos, venta de inmuebles que quedaron en manos de sus amigos y familiares, la “Ley Bala” y la “Ley del Despojo”, entre tantas gracejadas.

Tampoco se atrevieron a tocar el tema de los bonos extraordinarios que recibían al levantar la mano por la afirmativa, dando vía libre a iniciativas que ni siquiera se molestaron en leer. Así lo reconocieron algunos conspicuos Diputados de las penosas LVIII y LIX legislaturas.

No existió la división de Poderes como había prometido Rafael, quien llegó a controlar Puebla con la firme idea de hacer de ella un señorío. Y los paleros callaron.

Hoy, se muestran indignados por el comportamiento de los Diputados de MORENA, calificándolos de violentos y de no respetar la normatividad de la Cámara.

¿Violentos?

No hay informaciones narrando golpes o mentadas de madre. Es decir, no están registradas agresiones físicas ni verbales.

Sin embargo, en algo estoy de acuerdo con esos Periodistas indignados proclives al morenvallismo, en el sentido de que debe respetarse la legalidad interior del Congreso y, por supuesto, la Constitución.

El martes reciente, escribí: Inaceptable será ver a los Diputados morenistas actuar de la misma forma grotesca, al estilo de las legislaturas que le antecedieron en la era morenovallista, aprobando todo lo que les mandaron; que rendían cuentas en Casa Puebla; que vendieron su dignidad; que justificaron su penosa actuación diciendo que no tenía caso enfrentarse a una aplanadora; que hasta en la forma de cobrar sus sueldos y dietas perdieron el estilo. Vean lo que está pasando con los legisladores salientes, merecedores a un monumento a la abyección y la desvergüenza, que no negociaron las instalaciones de la 5 poniente y el Mesón del Cristo porque creo que ya no les dio tiempo.

Es clara la postura contra el abuso.

Esos Periodistas molestos contra el morenismo cameral, argumentan que no tenía caso acelerar los procedimientos para derogar la mal llamada “Ley Bala”, porque no urgía a los ciudadanos.

No sé si compartan su opinión los pobladores de Chalchihuapan, especialmente la señora Elia Tamayo, madre del niño asesinado, José Luis Tlehuatle, hecho trágico que se dio 60 días después del visto bueno a la “mal llamada Ley Bala”.

Lo que no reclamaron en sus columnas y micrófonos, lo practican en estos momentos.

Ya que claman por prioridades sociales, quizá les parezca bien que se dispensen trámites en los procedimientos de votar por abrogar la privatización del agua potable; la venta de cientos de inmuebles convertidos en hoteles y mansiones que quedaron en manos de funcionarios o prestanombres; de investigar hasta el fondo y en el menor tiempo posible, el despojo de comodatos sin respetar protocolos y el manejo gris de la Ciudad Modelo AUDI; la realización de obras ostentosas donde los moches son espectaculares, por citar algunas diabluras del panismo morenovallista.

¿Esto sí es prioritario para los poblanos?

Por supuesto.

No ahondemos, por el momento, de las afrentas a municipios y Juntas Auxiliares, donde los Ediles fueron condicionados y amenazados de forma permanente.

¿Abordar el asunto de los presos políticos, tampoco urge?

Es cierto, hay muchos Diputados, de todos los Partidos, con cero experiencia. Prácticamente son improvisados. La capacitación que recibieron la irán ejercitando; mientras, serán soportados por los que saben. Esto ha sucedido en las diferentes legislaturas; pocos son los que destacan, muchos se conforman con calentar la curul, formar parte de una comisión y cobrar a tiempo. Esto sí es incómodo, pero forma parte de la democracia mexicana.

directorabcd_reflexionesqyahoo.com.mx