CDMX a 8 de marzo de 2023.- Ante la amenaza injerencista de EU a México, hasta la oposición cerró con el presidente Andrés Manuel López Obrador. Desde el poder legislativo, el presidente de la Cámara de Diputados, el panista Santiago Creel respaldó la postura del gobierno obradorista sobre el rechazo tajante al intervencionismo norteamericano.
El diputado Creel Miranda coincidió así con la postura de indignación expuesta por el presidente Obrador en una Mañanera y señaló que Estados Unidos pareciera creer que seguimos en el siglo XIX y no. Por ello, bajo ningún pretexto o circunstancia se permitirá el arribo de la fuerza estadounidense para enfrentar a los cárteles mexicanos.
Y es que el secuestro y luego asesinato de dos de cuatro norteamericanos que llegaron a Tamaulipas –no se sabe en calidad de qué: turismo/Negocios-, es el marco en que el norte respalda una intervención a nuestro país para frenar al crimen organizado.
Monreal con AMLO
Por el lado de MORENA, el senador Ricardo Monreal, siempre crítico a las acciones del gobierno federal, también cerró filas con el presidente López Obrador y avaló la respuesta y visión del mandatario federal en este tema, quien señaló que es hipócrita la postura de los norteamericanos, ya que “se rasgan las vestiduras” por el secuestro de los 4 estadounidenses en México, cuando callan otros hechos de violencia; y a la vez, no asumen su parte de culpa en el auge de la violencia en nuestro país.
Esa respuesta, aunada a la realidad de que en Estados Unidos se fabrica el 80 por ciento de las armas con que se abastece la delincuencia en México, el senador zacatecano respaldó lo dicho por el presidente López Obrador.
Toda vez que la realidad del creciente auge del crimen organizado en México y la producción de drogas cuyo mercado es mayoritariamente Estados Unidos, no se entendería sin la complicidad del vecino del norte.
Sin embargo, como históricamente se sabe, Estados Unidos no aceptará su parte de responsabilidad en muchos de los problemas que aquejan al mundo, como es el caso de la violencia desatada en México. Así, el vecino del norte ya lanzó la amenaza de la intervención, para “ayudar” al combate al crimen organizado.
Incluso, el domingo pasado el FBI difundió un comunicado en el que ofrecía recompensa de 50 mil dólares por pistas que pudieran llevar al paradero de los ciudadanos norteamericanos perdidos en Tamaulipas.
Ante la situación del secuestro de cuatro ciudadanos norteamericanos y la muerte de dos de estos, está latente no sólo un problema diplomático sino una intervención militar en nuestro país. Toda vez que los gringos ya recurrieron al salvoconducto de declarar terrorismo a ciertas acciones para justificar la intervención; y en eso están, en vísperas de declarar terroristas a los cárteles mexicanos.
Si el gobierno norteamericano avanza en ese sentido; la “diplomática” relación entre México con EU se trastocaría, empezando por los acuerdos comerciales, de tecnología y demás, como es el caso del Plan Sonora; incluso la instalación de la planta de Tesla en Monterrey…
De ahí que en este caso que trasciende nuestras fronteras, la oposición tiene que cerrar filas también con el gobierno del presidente López Obrador; pues el asunto va más allá de un desacuerdo político; tiene que ver con la defensa de la seguridad nacional.
La unión de todas las fuerzas políticas en México ante las amenazas injerencias de Estados Unidos es lo menos que se puede pedir a la oposición y grupos no afines al gobierno de López Obrador, en bien de la libertad y soberanía nacionales.