Donald Trump, presidente de Estados Unidos, firmó el martes un memorándum para excluir a indocumentados del conteo del censo que determina las cuotas de representación en el Congreso: “He determinado, para el respeto de la ley y la protección de la integridad del proceso democrático, la exclusión de los extranjeros ilegales de la base de reparto”, indicó el mandatario en una carta enviada al Departamento de Comercio, encargado.
El Gobierno de Donald Trump intentó incluir en esta edición del censo una pregunta sobre la nacionalidad, pero este intento fue bloqueado por la Corte Suprema. Las estadísticas de población determinan en Estados Unidos la repartición del presupuesto pero también son vitales para asignar escaños en la Cámara de Representantes. En Estados Unidos, el voto popular no da la victoria, si no la representación en la cúpula legislativa.
“La inclusión de estos (indocumentados) en la población de un Estado con el propósito del reparto (de escaños) podría implicar la atribución de tres o más banquillos del Congreso que de otro modo serían asignados de forma diferente (o para un sector que no simpatiza con Trump)”.
“Democracia representativa”
En un comunicado, Donald Trump defendió esta acción porque “refleja mejor entendimiento de la Constitución y es consistente con los principios de la democracia representativa”. La asociación de defensa de los derechos humanos ACLU denunció que la acción del censo es “inconstitucional” y prometió desafiarla en tribunales. En Estados Unidos viven más de 10 millones de indocumentados, según estimaciones de la consultora Pew.
Detalles sobre el censo
Este censo, en Estados Unidos, tiene por objetivo determinar la repartición del presupuesto pero también son vitales para asignar escaños en la Cámara de Representantes. Si un partido, ya sea el Demócrata o Republicano, se adjudican más escaños en el recinto legislativo, más oportunidades tienen de emitir su voto a favor de su candidato. Ellos determinan al ganador, no el voto del pueblo.
- La victoria de un candidato recae sobre un colegio electoral de más de 500 electores provenientes de los 50 estados y Washington D.C.
- Si Donald Trump no cuenta a indocumentados, estos no podrán votar por sus candidatos de preferencia, y su sector pierde representatividad en la Cámara.
Para la Casa Blanca, permitir que los indocumentados sean contados de cara a la atribución de escaños podría crear “incentivos perversos”, como ofrecer una recompensa a estados que alienten la violación de las leyes de inmigración. Aritméticamente, la decisión de Donald Trump en el censo va contra estados muy poblados que votan tradicionalmente por demócratas, como California, que tiene importantes 53 escaños de la Cámara Baja.
Con información de AFP.