El alcalde, Tomihisa Taue, y los sobrevivientes instaron a los líderes mundiales, incluido el primer ministro, Shinzo Abe, a hacer más para prohibir las armas nucleares.
NAGASAKI.- La ciudad de Nagasaki recordó el 75 aniversario del ataque nuclear estadounidense sobre la localidad, en un contexto particular debido a la pandemia de coronavirus que obligó a limitar los homenajes.
El alcalde, Tomihisa Taue, y los sobrevivientes instaron a los líderes mundiales, incluido el primer ministro, Shinzo Abe, a hacer más para prohibir las armas nucleares y firmar el Tratado para la Prohibición de las Armas Nucleares de la ONU.
Nagasaki vivió un infierno el 9 de agosto de 1945, tres días después de Hiroshima, devastada por “Little Boy”, la primera bomba atómica, que causó unos 140 mil muertos; la segunda mató a 74 mil personas.
Las dos bombas terminaron por doblegar a Japón. El 15 de agosto de 1945, el emperador Hirohito anunció la capitulación frente a los Aliados, poniendo fin a la Segunda Guerra Mundial.
En la ceremonia luctuosa los participantes asistieron a una misa en la iglesia de Urakami, cerca del lugar del bombardeo, mientras otros fueron a un servicio conmemorativo en el Parque de la Paz. El número de personas autorizadas a participar fue reducido a 500, 90 por ciento menos que años anteriores.
A la hora del bombardeo sonaron las campanas en el monumento de la paz y los asistentes guardaron un minuto de silencio.
El alcalde Taue pidió a los asistentes que aplaudieran a los supervivientes, conocidos en Japón como los “hibakusha”. Agencias