La gente debe analizar, investigar, involucrarse en política, conocer su Constitución y los parches adicionados, para no ser sorprendida con declaraciones tendenciosas, con mentiras o verdades a medias.
Debería saber en qué consisten las transformaciones de que tanto hablan los integrantes de la 4T; qué significa un cambio de régimen que puede llegar de forma violenta con una revolución, un golpe de Estado o la reconstrucción seguida de un país fallido, reemplazando todas o en parte las instituciones existentes, la administración y la burocracia, en lugar de pensar que un cambio de esas dimensiones es como comerse una sopa maruchan.
México, no es un país fallido, pero sí donde el abuso y los excesos se dejaron crecer hasta convertirlo en un territorio de desigualdades e injusticia.
Por supuesto que hacen falta cambios, modificar conductas, castigar a los corruptos, pero no a costa de la persecución; de perdonar a unos que se doblegan ante el poder o satanizar a los que se oponen al radicalismo y la concentración del poder para volver a lo mismo.
La lucha que protagonizan en estos momentos la llamada Cuarta Transformación y el Instituto Nacional Electoral, es un ejemplo de intentar doblegar a éste último, desaparecerlo o sustituir a sus Consejeros.
Para la Cuarta Transformación, el INE no puede ni debe ser oposición al pretendido nuevo régimen ni cumplir con la legalidad electoral que impida el avance de la democracia ficticia.
Se integró a la Constitución la Revocación de Mandato, suscribiendo artículos y transitorios. El INE es el encargado de organizar, convocar e incentivar la participación ciudadana; la Cámara de Diputados de aprobar la iniciativa de ley y dotar de recursos a la institución electoral para la instalación de casillas, la capacitación de personal y darle a la jornada comicial la seriedad que merece, pues no es cualquier elección, es la posible destitución del Presidente de la República por pérdida de confianza o, en su defecto, la ratificación de su popularidad.
El Congreso, con mayoría de MORENA, negó los recursos y el INE justifica el impedimento de llevar a cabo el ejercicio, a no ser que se quiera repetir la vergonzosa consulta de enjuiciamiento a actores del pasado que resultó un fracaso.
El INE, a través de Lorenzo Córdova, dio a conocer que con una votación de 6-5, la mayoría de Consejeros DECIERON POSPONER, NO CANCELAR, la revocación de mandato, hasta que la Corte o el Tribunal Electoral resuelvan la controversia interpuesta al respeto.
Todavía no se sabe si las firmas entregadas al INE cumplen con los requisitos; si son válidas; si no hay chanchullos; porque de no juntarse los 2 millones 830 mil plenamente validadas, no sería posible el ejercicio legítimo.
Por otra parte, el INE puede realizarlo hasta el límite de sus posibilidades; como también podría discutirse y negociar los recursos que hagan falta, siempre y cuando los Diputados morenistas estén dispuestos, en lugar de pedir juicio político para los Consejeros que votaron a favor de posponerlo.
Si el Estado está decidido a que el INE pase a convertirse en la Comisión Federal Electoral, dependiente de la Secretaría de Gobernación, pues que lo asuma, al fin que el poder manda, no el pueblo ni la Constitución. Total, la Cuarta Transformación tiene en Manuel Bartlett Díaz al experto que manejó la elección de 1988, valiéndole la desacreditación del propio Andrés Manuel López Obrador, Porfirio Muñoz Ledo y Cuauhtémoc Cárdenas.
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LA REVOCACIÓN DE MANDATO está siendo promovida por el Presidente López Obrador y sus simpatizantes, aunque en las carpas receptoras de firmas dice equivocadamente RATIFICACIÓN. No hay grupos ciudadanos pidiendo que el Jefe del Ejecutivo se vaya, con excepción del desfiguro llamado FREEENA.
Las encuestas tienen a AMLO con 65 por ciento de aprobación.
No veo marchas por las calles ni manifestaciones ni plantones pidiendo su renuncia.
¿Para qué gastar 3,830 millones de pesos?
El asunto es político vistiendo una botarga de democracia.
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EL SENADOR RICARDO MONREAL, sugiere abrir el diálogo entre el INE y la Cámara de Diputados. La negociación es posible.
Tiene razón, siempre y cuando exista sensatez y buena fe.
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“CUANDO UNA persona concentra Poderes, se acerca a la tiranía”, es la respuesta que dio el Senador Ricardo Monreal al Gobernador de Veracruz Cuitláhuac García.
El legislador advirtió que en aquel Estado hay omisión y manipulación de la ley, mientras que el mandatario le reviró señalándolo de defender delincuentes.
Fue un Juez el que determinó que Monreal tenía razón, pues habían sido encarcelados ilegalmente por “ultrajes a la autoridad” un grupo de jóvenes, siendo liberados al explotar la confrontación entre los morenistas.
Cuitláhuac García Jiménez, ha sido acusado por ciudadanos veracruzanos de utilizar la represión disfrazada de justicia.