Washington. El Secretario de Estado de EU, Mike Pompeo, pidió a las fuerzas de seguridad de Venezuela que protejan la “integridad personal” del autoproclamado presidente venezolano, Juan Guaidó, por su parte, el Secretario venezolano de Defensa denunció un “golpe de Estado”.
“Pedimos a las fuerzas de seguridad de Venezuela que protejan la seguridad y la integridad personal de Juan Guaidó”, dijo Pompeo, que intervino ante el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), con sede en Washington y reunido de manera extraordinaria para debatir sobre Venezuela.
Asimismo, “hoy, anuncio que EU está listo para brindar más de 20 millones de dólares en asistencia humanitaria al pueblo de Venezuela“, indicó.
Pompeo, además, instó al resto de miembros de la OEA a reconocer a Guaidó como el presidente “legítimo” venezolano y solicitó una reunión regional de los ministros de Exteriores de los países del continente americano para tomar una decisión sobre Venezuela.
“Es hora de que la OEA, como institución al completo, reconozca a Guaidó. Todos los miembros de la OEA deben alienarse con la democracia y el resto al Estado de Derecho”, dijo Pompeo, quien consideró que el tiempo para el “debate” se ha terminado y es hora de adoptar acciones ante un “régimen moralmente en bancarrota”.
“El régimen del antiguo presidente Maduro es ilegítimo, todas sus declaraciones son ilegítimas”, reiteró.
El titular de Exteriores inició su discurso declarando a EU “amigo” del pueblo Venezuela y recordó a las personas que han muerto en los últimos días en protestas en ese país.
Cuando Pompeo terminó de hablar, una mujer se levantó y sostuvo una pancarta mientras a gritos acusaba a EU de haber dado “un golpe de Estado” en el país caribeño.
La mujer fue desalojada de la sala donde se celebra la reunión del organismo por la seguridad de la OEA.
MILITARES DENUNCIAN “GOLPE DE ESTADO”
Por su parte, el Secretario venezolano de Defensa, Vladimir Padrino, denunció un “golpe de Estado” al aludir la autoproclamación del líder del Parlamento, Juan Guaidó, como “presidente encargado” del país, un hecho que consideró “reprochable”.
La Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) de Venezuela dijo en un comunicado que no aceptará a un “presidente autoproclamado” ni se “subordinará a una potencia extranjera”, y rechazan los “groseros actos de injerencismo” de algunos Gobiernos.
El escrito señala que la FANB no aceptará “jamás” a un gobernante “impuesto a la sombra de intereses oscuros”.
“Rechazamos del modo más enérgico posible los groseros actos de injerencismo llevados a cabo por gobiernos extranjeros los cuales consideramos irrespetuosos del derecho internacional y del principio de autodeterminación de los pueblos, siendo además ofensivos a la dignidad de los venezolanos”, se indica en el escrito.
Asimismo, se asegura que la FANB va a garantizar “la paz ciudadana y el correcto funcionamiento de las instituciones del Estado” y no tolerará “hechos vandálicos o terroristas por parte de grupos que promuevan la violencia como perverso mecanismo para alcanzar sus fines”.
Maduro, dispuesto a que México y Uruguay sean mediadores
El Gobierno de Nicolás Maduro está dispuesto a un diálogo político en el que podrían mediar Uruguay y México, dijo este jueves a Sputnik el canciller venezolano Jorge Arreaza.
“Creemos que el Gobierno de Tabaré Vázquez (en Uruguay), así como el de Andrés Manuel López Obrador (en México) tienen suficiente trayectoria y moral como para facilitar el encuentro en América Latina y el Caribe entre los gobiernos, como el de Venezuela. También pueden participar siempre, con su buena voluntad y fe, en los procesos de diálogo en Venezuela”, sostuvo Arreaza en entrevista exclusiva con Sputnik.
El miércoles México y Uruguay anunciaron que seguían reconociendo al Gobierno de Maduro y formularon un llamado a encontrar una solución pacífica y democrática a la crisis venezolano, sumándose a la Organización de las Naciones Unidas (OEA) y a la Unión Europea (UE).
Así, esos dos gobiernos tomaron distancia de la postura asumida por unos 15 países americanos, encabezados por EEUU, que reconocieron al diputado opositor Juan Guaidó, autoproclamado el miércoles como presidente encargado de Venezuela.