También conocido como el Plan A, las modificaciones en materia política-electoral no pasaron el primer filtro del poder legislativo, por lo que se espera la presentación del Plan B de AMLO.
Con 269 votos a favor, 225 en contra y una abstención, la Cámara de Diputados desechó la Reforma Electoral de AMLO, esto porque, durante la sesión ordinaria, se discutió y votó la iniciativa de carácter constitucional, misma que requiere mayoría calificada (dos terceras partes) y, al no juntarla, la iniciativa se desechó.
Este martes 6 de diciembre, las y los diputados de México decidieron declinar la iniciativa promovida por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), pues los votos acumulados entre Morena, PT y PVEM no fueron suficiente para que la llamada Cuarta Transformación (4T) modifique la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM); sin embargo, como esto ya se esperaba, el mandatario promoverá el Plan B.
Después de cinco horas de discusión parlamentaria, la facción oficialista se quedó a 65 votos de aprobar la iniciativa constitucional promovida desde el ejecutivo federal y que pretendía reordenar al Instituto Nacional Electoral (INE), Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), la Cámara de Diputados y el Senado de la República.
Las diferentes participaciones de las y los diputados fueron apasionadas, donde los puntos de vista apelaban, desde los promotores del gobierno federal, a una administración adelgazada, pero eficiente, donde la duplicidad de funciones que se presentan entre los Organismos Públicos Locales (OPLEs) y el INE dejen de existir.
Además, sentenciaban que lo mejor para la representación ciudadana en los organismos electorales es que se reduzca la cantidad de magistrados del Tribunal y consejeros del Instituto, además de reducirles sus salarios y que lleguen a sus cargos a través del voto popular.
Por el otro lado, los detractores señalaron que esta reforma es un intento más de la administración de López Obrador para debilitar los organismos descentralizados y robustecer el peso del gobierno de cara a las elecciones de 2024, donde se renovará la presidencia de la república, ambas cámaras legislativas, la jefatura de gobierno de la Ciudad de México y otras ocho entidades.
De tal modo que el encono establecido entre ambas posturas ideológicas se mostró como incompatible y, al no llegar a ningún consenso, se procedió con la votación, donde Morena y sus aliados se quedaron con la mayoría simple, pero ésta no basta para modificar la CPEUM, por lo que se espera que AMLO se atenga al último reducto para tener una reforma electoral.
A esta estrategia se le conoce como el Plan B de AMLO, el cual fue anunciado desde el 15 de noviembre por el propio López Obrador al ver que ninguna de las bancadas opositoras buscó consensar con Regeneración Nacional en este proyecto de decreto; sin embargo, aunque se puede esperar un cambio en las instituciones políticas y electorales, éste no será tan hondo como si se modificara la Constitución.
Aunque la versión definitiva del Plan B no ha sido difundida, el proyecto de dictamen ya fue entregado a la Cámara de Diputados por Adán Augusto López Hernández, titular de la Secretaría de Gobernación (Segob). Además, Ignacio Mier Velazco, líder de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, se mostró bastante informado en el tema y señaló algunas cosas que la nueva estrategia de AMLO no puede modificar.
Por ejemplo, en el Plan A del presidente se prometió reducir de 11 a siete los consejeros electorales del INE, de 500 a 300 los diputados federales y de 128 a 96 los senadores, pero como la cantidad de funcionarios en estas dependencias es algo que viene referido en la CPEUM, pues el Plan B de AMLO simplemente no puede alterarlos.
Aunado a ello, AMLO había propuesto un nuevo mecanismo de asignación de legisladores federales, donde se eliminaban los plurinominales y los partidos deberían de proponer listados por los cuales las y los ciudadanos ejercerían su voto; sin embargo, como los legisladores de representación proporcional están respaldados por la Constitución, esta modificación tampoco podrá ser presentada.