Muchas y grandes expectativas se han creado en torno a la selección mexicana para este verano, el cual, definitivamente, se arrancó con el pie izquierdo.
El equipo de Gerardo Martino ha tenido un inicio complicado, dejando dudas ante Costa Rica, perdiendo el título de la Nations League contra los Estados Unidos y un panorama no muy alentador, al ahora estar obligados a sacar la casta en la Copa Oro.
Han sido varios los factores que se han conjugado para que el tri no haya arrancado como se esperaba, fallando penales decisivos, sin un centro delantero de peso y un futuro con algunas dudas que tendrán que despejar en la cancha
Hasta los penaltis
Después del partido amistoso que jugaron con Islandia, en el que vinieron de atrás para ganar 2-1, la selección mexicana disputó la semifinal de la Nations League ante Costa Rica.
El equipo del Tata Martino no pudo superar a los ticos en el tiempo regular, carente de variantes y contundencia, por lo que necesitó de llegar hasta los penaltis para acceder a la final del torneo.
Los cuestionamientos que sembró en la cancha se dispersaron un poco con el pase al juego por el título ante los Estados Unidos, dejando en el olvido la tremenda falla que protagonizó Uriel Antuna en el primer disparo de la tanda, al no atinarle ni a la portería, sacando sus compañeros el barco a flote con sus buenas ejecuciones, así como la intervención de Guillermo Ochoa en la muerte súbita.
Llegó la debacle
Después de 14 años, México pierde un título frente a los Estados Unidos, al dejar la Nations League en manos del cuadro de las barras y las estrellas.
Y es que, cuando parecía que el triunfo se quedaría con los aztecas, al ponerse dos veces en ventaja, la primera de ellas al minuto de juego y la segunda a 11 minutos del final, en ambas se vio alcanzado y superado en los tiempos extras, donde se concretó la catástrofe.
Christian Pulisic marcó de penalti el gol de la victoria al minuto 114, mientras que México tuvo el empate en los pies de Andrés Guardado en la última jugada del partido y lo falló.
El que perdona, pierde
Y sí, esa falla de Andrés Guardado acabó con las ilusiones de la selección mexicana de, al menos, mandar la definición a la tanda de penaltis. Sin embargo, el capitán del equipo, con toda su experiencia a cuestas, erró en el momento más importante y todo se acabó, dejando el título de la Nations Legue en poder de los estadounidenses.
¿Y los delanteros?
En tres partidos (Islandia, Costa Rica y Estados Unidos) México lleva cuatro goles, ninguno de ellos de sus delanteros centro.
Mucho se habla de la ausencia de Raúl Jiménez y los números hacen más fuerte este tema, al no ser capaces los atacantes de marcar con el tricolor.
Y es que, con excepción de Hirving ‘Chucky’ Lozano, ni Henry Martín ni Alan Pulido se han podido hacer presentes en las redes enemigas, adoleciendo la selección mexicana de una clara falta de contundencia.
Urge mejorar
La buena noticia para la selección mexicana es que en puerta tiene tres amistosos de preparación para la Copa de Oro, en los que tendrá que mejorar su accionar para enfrentar el torneo de la Concacaf con una doble obligación de ganarlo, tras su caída en la Nations League.
Honduras (12 de junio), Panamá (30 de junio) y Nigeria (3 de julio) son los rivales a los que tendrá que medirse antes de arrancar su lucha en el Grupo A de la Copa de Oro el 10 de julio.
Ganar estos encuentros y mostrar un buen funcionamiento le daría al tri esa dosis de confianza que hoy está abollada, si es que no quieren dejar el cetro en manos de alguien más. Así que hay mucho por mejorar.
Fotos: Imago 7