Así como Fernando Valenzuela se bebió la gloria con los Dodgers en 1981, Julio Urías y Víctor González lo hicieron 39 años después para igualar al ‘Toro’, al ganar la Serie Mundial enfundados en la franela del equipo de Los Ángeles.
Ambos lanzadores le pusieron un sabor muy mexicano al séptimo gallardete de la novena californiana, con un admirable trabajo sobre la loma cuando fueron requeridos, a tal grado que en el sexto duelo ante los Rays de Tampa Bay, González se quedó con la victoria, mientras que Urías se llevó el salvamento.
En la parte alta de la quinta entrada, cuando los Rays ganaban 1-0, González relevó a Báez para tomar el control de las acciones, incluso retirando a sus tres rivales en fila en la sexta entrada, misma en la que Dodgers le dio la vuelta a la pizarra 2-1, dejando el azteca el juego ganado en la parte alta del séptimo rollo, tomando su lugar Brusdar Graterol.
Sin embargo, el pitcher venezolano sólo enfrentó a tres oponentes antes de dejar la bola en manos de Urías, quien en la misma séptima entrada comenzó a fraguar el triunfo.
El lanzador mexicano se encargó de sellar la victoria, al mostrarse con temple, seguridad y mucha inteligencia en el momento más apremiante del duelo, pues había que detener a los Rays de Tampa Bay para mantener la ventaja, llevándose el salvamento.
A inicios de la década de los ochentas, Valenzuela desató la ‘Fernandomanía’ con sus grandes actuaciones sobre la lomita, sobre todo, al lanzar el tercer juego de la Serie Mundial ante los Yankees de Nueva York, quienes ganaron los dos primeros duelos.
Ahí, Valenzuela se fajó para tirar toda la ruta y resultar el pitcher ganador, llevándose a la postre el título de las Grandes Ligas con los Dodgers, un logro que Urías y González acaban de conseguir 39 años después.
Julio Uríasfinalizó la encomienda al colgar el out 27 con un chocolate sobre Willy Adames, quien se ponchó sin tirar, desatando la alegaría del lanzador mexicano, que lo mismo ha sido utilizado como abridor que como relevo en los Dodgers.
En esta Serie Mundial, el sinaloense se convirtió en el cuarto lanzador mexicano en abrir un juego del Clásico de Otoño, al aparecer en el cuarto encuentro.
La última vez que los Dodgers conquistaron la Major League Baseball fue hace 32 años, cuando enfrentaron y derrotaron a los Oakland Athletics.
Hoy, han regresado a lo más alto en la Gran Carpa con un campeonato muy a la mexicana.