DIEGO GARCÍA RAMÍREZ
Cobijada por su grupo de incondicionales, compuesto por amigos cercanos; funcionarios más morenovallistas que morenistas; gurús que no se ven, pero la alientan; así como uno que otro familiar, la Alcaldesa Claudia Rivera Vivanco rindió su II informe, siendo notoria la ausencia del Gobernador Miguel Barbosa, de Rectores de Universidades, de funcionarios estatales y legisladores que no comulgan con su comportamiento valentón ni avalan su ineficiencia en la administración municipal.
En tanto, frente al ayuntamiento, ciudadanos le reclamaban su intentona de reelegirse sin ningún mérito, pues ha fallado en temas sustanciales como seguridad pública y el abandono en que se encuentran cientos de colonias y Juntas Auxiliares.
Elogió la presencia de la Senadora Nancy de la Sierra, esposa del Diputado local José Juan Espinosa, admirador de Porfirio Muñoz Ledo. Igualmente se emocionó al ver a Bertha Luján, ex aspirante a dirigir el Partido MORENA.
Rivera Vivanco, no perdió la oportunidad de proponer al Gobernador Barbosa trabajar en colaboración, pero nunca la subordinación; señaló que peleará por la autonomía municipal a la que ha defendido y no por confrontación, sino porque se la han querido arrebatar; subrayando que ha hecho más obras que en anteriores administraciones. “No somos pares, lo sé, pero tampoco somos inferiores ni subordinados. De nueva cuenta le expreso mi respeto total y disposición absoluta para trabajar de manera coordinada, pero con respeto a la autonomía municipal”, subrayó.
Señaló que, a diferencia de gobiernos pasados, no negocio con grupos de poder y tampoco con medios de comunicación para que no criticaran su gestión.
¿Verdad o mentira?
Claudia, extrañamente, atiende con beneplácito a medios de comunicación que se han declarado enemigos de Miguel Barbosa. Sin embargo, niega dar convenios “para que no nos peguen”.
¡Qué interesante!
¿Será que paga para que la elogien y ataquen al Gobernador?
Destacó su controversia ante la Corte para que Barbosa no asuma el control de la policía municipal, a pesar de la ineficacia suya para combatir al crimen.
Dice respetar al mandatario, pero lo apedrea, señalando que no tolerará más “García Luna” como en otros gobiernos sí ocurre. Frase que fue interpretada con dedicatoria a Ardelio Vargas Fosado, de quien dicen asesora a Miguel Barbosa.
Despotricó contra Eduardo Rivera Pérez, acusándolo de no defender la autonomía municipal, entregándosela a Rafael Moreno Valle, como ella sí lo ha hecho en la actualidad. Y le reprochó haber aceptado la privatización del agua, aunque ella no ha hecho nada ni tampoco ha aclarado su relación cercana con Moreno Valle, Antonio Gali Fayad y Martha Erika Alonso, a los que sirvió y de los que fue candidata utilizando nada más el nombre de MORENA.
La Alcaldesa es considerada una infiltrada en el morenismo.
Increíblemente asevera que reorientó el presupuesto en 500 millones de pesos para enfrentar la pandemia reactivando la economía. La pregunta es: ¿Dónde está el proyecto, en qué consiste y en qué ha ayudado a los ciudadanos para combatir los contagios y la muerte? Destaca la entrega de despensas, pero nunca aclaró que fueron compradas a sobreprecio. ¡La caridad como negocio!
Si algo faltara, presumió sus cambios administrativos para acabar la corrupción.
¡Aleluya, aleluya!, el Palacio Municipal, sus corredores y sus servidores públicos, son los únicos impolutos en Puebla.
No habló de los baches en todas las calles que han hecho del municipio una alberca gigante; tampoco de los hoyos financieros que seguramente serán encontrados si la reelección no le favorece.
No acertó a explicar sus famosos y horrendos bolardos.
Tampoco su influencia para permitir la reelección del sindicato municipal por así convenir a sus intereses.
¡Salve a la Presidenta Municipal!
“Yo no vine a hacer una carrera política, sino un buen gobierno”, frase para la posteridad, no le hace que quiera reelegirse o negociar un curul estatal o federal.
Si algo faltara, Claudia Rivera Vivanco no hizo alusión a los señalamientos de los Regidores del PRI y del PAN, Silvia Tanús Osorio y Enrique Guevara Montiel, respectivamente, alusivos a que la Alcaldesa ha tenido una administración desordenada con subejercicios, ineficacia y que guarda recursos en Bancos para gastarlos en la elección de 2021, lo que es un insulto a la población.
“Dos años perdidos con Claudia Rivera”, es la conclusión de los Regidores, que seguramente comparte el G5 y la mayor parte de la población.
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