Por: Geppetto
El Coordinador de la bancada de MORENA en la Cámara de Diputados federal, Ignacio Mier Velazco, levantó una denuncia ante la Fiscalía General de la República contra el ex titular de la UIF Santiago Nieto Castillo, el Gobernador Miguel Barbosa Huerta, el Senador Alejandro Armenta Mier y el Fiscal Gilberto Higuera Bernal, por los posibles delitos de revelación de secretos, tráfico de influencias, así como delitos cometidos por servidores públicos previstos en el Código Penal Federal.
“El que avisa no traiciona”, diría en un video grabado y en su cuenta de twitter.
Se dice perjudicado.
Asegura que los denunciados han afectado el Movimiento de Regeneración Nacional y a personas que son contrarias a sus intereses.
Se autodenomina congruente, de convicciones e ideales, olvidando que elogio en boca propia es vituperio.
Ignacio Mier Velazco, se muestra indignado, soberbio, enojado, frustrado. No es para menos, ha caído en escándalos que lo pintan de cuerpo entero como un personaje oscuro de la política que ha protegido a delincuentes, siendo, además, socio del extorsionador Arturo Rueda Sánchez, preso en Tepexi de Rodríguez y accionista del desprestigiado periódico Cambio junto con sus cómplices que viven ocultos negando cualquier vínculo con ese medio.
Fíjense bien el motivo que lo orilla a denunciar a Nieto, Barbosa, Armenta, Higuera, pero no se atreve a negar que forma parte del delito grave de lavado de dinero por más de 400 millones de pesos, enriquecimiento ilícito, falsedades en declaraciones, copartícipe en extorsiones y de dictar la línea editorial en su periódico, firmando convenios publicitarios, denostando a sus rivales políticos y elogiándose así mismo, cayendo en un claro conflicto de intereses, porque Ignacio Mier es servidor público.
Ignacio Mier Velazco, NUNCA NIEGA SER CÓMPLICE DE SU AMIGO Y SOCIO, el “Tlacoyero” Arturo Rueda Sánchez; tampoco las acusaciones en su contra por lavado de dinero; menos ser parte en la conducción intelectual de las extorsiones y menos que es el que dicta la línea editorial en su periódico que denigra el periodismo.
La conciencia lo traiciona.
Denuncia Mier Velazco a los que califica de ser sus enemigos, soslayando que él debe ser el primero en ser investigado por corrupción e impunidad.
Su ineficiencia e ineficacia como operador político es lo de menos.
En su afán de defender su “honor”, olvida decir la verdad Ignacio Mier Velazco, ganando con honores el PREMIO PINOCHO Y SU CORCHOLATA DE PATO, POR MENTIROSO.