El acompañamiento a Beatriz Gutiérrez Müller se dio con varios efectivos del grupo de Servicios Especiales de la Policía Militar
Pese a que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha descalificado que se utilicen efectivos de la fuerza pública como guardaespaldas, su gobierno no escatimó en recursos para proteger a su esposa Beatriz Gutiérrez Müller en al menos dos visitas que hizo a la ciudad de Puebla este año, en las que fue escoltada por militares, entre ellos oficiales de alto nivel, equipados con armamento táctico, así como automóviles y camionetas de lujo pertenecientes a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
A través de dos misivas confidenciales en poder de El Sol de Puebla, extraídas por el grupo internacional de hackers, Guacamaya, se sabe que el titular de la Sedena, Luis Cresencio Sandoval González, ordenó expresamente a varios efectivos del grupo de Servicios Especiales de la Policía Militar salir de sus cuarteles y acompañar en todo momento a Gutiérrez Müller durante dos viajes redondos que realizó de la Ciudad de México a la capital poblana.