Estoy convencido de que el armentismo pasó de proyecto a certeza, que habrán de confirmar sus millones de seguidores, así como los pesimistas o incrédulos la noche del 2 de junio.
¡Alejandro Armenta, será candidato y gobernador!
No tengo la menor duda.
Es la realidad de Puebla definida como la esperanza de los poblanos.
Correcto es que todo inició como un proyecto que tiene diferentes clasificaciones, englobándose el de Armenta en el renglón público y social con calidad productiva en todas las ramas que consolidará al Estado como una potencia nacional con vertientes internacionales.
Todo proyecto propone transformación y beneficio colectivo sin menoscabo. El de Armenta es de largo alcance, despertando expectativas que no se habían visto.
Obstáculos, por supuesto que los habrá; traiciones, también; boicots, no tengo duda, pero nada que no se pueda vencer con trabajo, talento, perseverancia y consistencia, cuatro características enriquecedoras de las cualidades del senador que, lo ha dicho, necesita de unidad y el esfuerzo de la gran mayoría para lograrlo.
La mudanza de proyecto a certeza transformará la entidad poblana sin dejar lugar a deseos perversos que añoran el fracaso.
Armenta, el predestinado, coronará una larga trayectoria.
Se tropezó y se levantó en diversas ocasiones, es lo que le ha dado la madurez y paciencia que le permitirá gobernar con acierto y destreza.
Las encuestas nacionales serias y confiables, coinciden en que el senador ganará de manera contundente, sin que esto signifique un día de campo, porque la coalición PAN, PRI, PRD y PSI, que cobija a Eduardo Rivera, va por el fraude que, para su desgracia, fracasará.
Armenta, se mantuvo dos años a la cabeza en las mediciones, ganando la interna de Morena y convirtiéndose en coordinador estatal de la defensa de la cuarta transformación. El fenómeno se repetirá de aquí a junio. No hay forma de revertir los números de proyección larga de las encuestadoras. Por lo mientras, GobernArte y RUBRUM, lanzaron sus números. La primera, que apareció el domingo 21 de enero, da 30 puntos de ventaja al senador; la segunda, conocida hoy, consolida la ventaja por 24 puntos. Es decir, los números han crecido para desgracia de la oposición que al paso de los días es inocultable que se desmorona.
El toluqueño Eduardo Rivera Pérez, vende su alma a los dioses paganos a cambio del milagro de no ser apaleado. Las ilusiones de ganar nunca las tuvo.
POSDATA: Existen encuestas profesionales y serias; encuestas cuchareadas y encuestas fraudulentas. No todas se miden con la misma vara del descrédito o confiabilidad. Cada una tiene un lugar ganado a pulso.
Las conocemos. ¿O no?
POSDATA 2: En Puebla, sabemos de los estudios de opinión tramposos, conducidos por vivales que han sido desenmascarados. Sin embargo, hay un par de casas encuestadoras honestas que no tienen el lugar preponderante que merecen.
POSDATA 3: La paciencia es una virtud del ser humano muy difícil se lograr. Intentarlo, vale la pena; pocos lo consiguen.
directorabcd_reflexiones@yahoo.com.mx