Los viajeros de Estados Unidos sufrieron cancelaciones y retrasos de vuelos el jueves (06.11.2025), en la víspera de una jornada que amenaza con ser caótica por la orden del gobierno de reducir el tráfico aéreo debido a la falta de personal por la parálisis presupuestaria.
La Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos ordenó este jueves una reducción del 4% en las operaciones de vuelo programadas para mañana, a partir de las 6:00 a.m. hora del Este, citando señales de “tensión en el sistema” que podrían afectar la seguridad del transporte aéreo, reduciendo la instrucción inicial que era del 10% en 40 terminales aéreas.
La Administración publicó un calendario de reducciones, que iniciará con un 4% este viernes y aumentará a un 6% el 11 de noviembre y hasta un 10% el 14 de noviembre, si el cierre de Gobierno continúa vigente para esa fecha.
La FAA señaló que los pasajeros afectados por cancelaciones tendrán derecho a reembolsos, pero no a otros gastos como hoteles, siguiendo los procedimientos habituales cuando la demora o cancelación no es culpa de la aerolínea.
Más de 750 vuelos cancelados
Las aerolíneas que operan en Estados Unidos cancelaron el jueves anticipadamente más de 750 vuelos previstos para el viernes, según el sitio web de seguimiento FlightAware.
American Airlines informó en un comunicado que la orden del gobierno le obliga a suprimir 220 vuelos cada día.
Delta Airlines canceló unos 170 vuelos programados para el viernes, según informó la aerolínea, mientras que la cadena CNN informó de que Southwest Airlines suspendió 100 despegues.
La parálisis presupuestaria que obliga a cerrar servicios públicos federales, se convirtió el miércoles en la más larga de la historia de Estados Unidos, y dejó sin su salario a decenas de miles de controladores aéreos, personal de seguridad aeroportuaria y otros trabajadores, lo que provoca escasez de personal en el sector.
El jueves, más de 6.400 vuelos sufrieron retrasos y unos 200 fueron cancelados, según datos de FlightAware, y los viajeros tuvieron que hacer largas colas en los controles de seguridad.
Los principales aeropuertos del país se vieron afectados. En los de Boston y Newark, los retrasos superaron las dos horas en promedio. En los aeropuertos O’Hare de Chicago y Reagan National de Washington fueron de más de una hora.
Las autoridades afirmaron que querían actuar antes de que ocurriera un accidente.
Temporada alta de viajes
Estas medidas se implementan justo cuando el país entra en su temporada alta de viajes, con el Día de los Veteranos y el Día de Acción de Gracias a la vuelta de la esquina.
Mientras millones de estadounidenses enfrentan un probable caos en los viajes debido a la escasez de personal de control de tráfico aéreo, el gobierno Trump trató de tranquilizar a la gente asegurando que volar sigue siendo seguro.
“Es seguro volar hoy, mañana y pasado mañana gracias a las acciones proactivas que estamos tomando”, dijo el secretario de Transporte, Sean Duffy, el jueves por la noche en X.
Las nuevas cancelaciones podrían afectar miles de vuelos cada día. Se prevé que la reducción de vuelos afecte algunos de los aeropuertos más concurridos del país, como los de Atlanta, Newark, Denver, Chicago, Houston y Los Ángeles.
United Airlines y Delta, dos de las mayores compañías aéreas estadounidenses, aseguraron que estas medidas no afectarán a sus rutas internacionales.
Con información de DW
