El ciclo de Efraín Juárez al frente de Atlético Nacional llegó a su fin de manera abrupta. Tras conquistar la Liga BetPlay y la Copa Colombia, el entrenador mexicano presentó su renuncia, decisión que el club confirmó el martes 14 de enero mediante un breve comunicado.
“Es cierto la renuncia del profesor Efraín. Noticia en desarrollo. Una vez estemos listos para hablar, lo haremos. Muchas gracias”, informó el departamento de comunicaciones del equipo ‘verdolaga’, sin ofrecer mayores detalles sobre los motivos que llevaron a la salida del técnico.
La sorpresiva decisión generó conmoción entre los aficionados del conjunto antioqueño, que vieron en Juárez la continuidad de un proyecto deportivo que prometía consolidarse tras los recientes títulos. Sin embargo, detrás de este éxito deportivo, existían tensiones internas relacionadas con la política de contrataciones del club.
Inconformidad con los refuerzos y salidas del plantel
Según información difundida por Fox Sports México, el principal motivo de molestia de Juárez fue la falta de alineación entre sus planes deportivos y las decisiones de la directiva en cuanto a fichajes. Los refuerzos que llegaron para la nueva temporada, como Faber Gil, Billy Arce, Matheus Uribe y el uruguayo Camilo Cándido, no habrían sido del agrado del estratega. A esto se sumaron salidas de jugadores clave, situación que habría sido determinante en su decisión de abandonar el cargo.
En entrevista con el citado medio, Juárez expresó su incomodidad respecto al proceso de contratación del club:
“Obviamente, tengo opinión y doy mis opiniones sobre qué posiciones, creo que el equipo debe reforzar, pero la responsabilidad la tiene el director deportivo y el club. Soy bastante respetuoso porque me entregaron un equipo bien conformado. Confío en que hagan un buen trabajo en el mercado de fichajes para competir tanto en la Liga como en la Copa Libertadores ”, explicó.
Sobre la incorporación de Camilo Cándido, Juárez fue claro al señalar que, aunque se trataba de una opción para reforzar al equipo, él no tenía injerencia directa en la decisión final:
“Es una de las opciones que tenemos en esa posición. Soy respetuoso de los tiempos y responsabilidades de cada uno en el club. Yo paso mi informe sobre lo que considero que necesita el equipo, y el club evalúa lo que se puede hacer”, señaló.
Expectativas frente a la Copa Libertadores
En la misma entrevista, Juárez reconoció los retos que enfrentaba el club de cara a la Copa Libertadores, siendo consciente de las diferencias presupuestarias respecto a equipos de ligas como la brasileña o la argentina.