Desde hace más de un año escribo y también hablo por micrófono sobre la seguridad de que Alejandro Armenta Mier es el político más completo con trayectoria, méritos, capacidad y experiencia, que debe ser candidato y gobernador de Puebla en 2024.
Lo pide la mayoría de ciudadanos del Estado; no es invento, es una realidad palpable.
Las encuestas, todas, le dan al senador una ventaja abrumadora en su Partido para ganar la interna y apuntan que en cualquier escenario triunfaría en los comicios constitucionales sobre el contendiente que sea. Su ventaja de 23 puntos crece, en lugar de disminuir.
Por supuesto que existen los imponderables.
La vida puede cambiar de un momento a otro.
Muchas veces la política es veleidosa, producto del capricho y la soberbia de aquellos que la practican y ostentan el poder.
Ante esto, si algo es necesario imponer es la sensatez y la decencia política, no hace daño, por el contrario, genera confianza y expectativa positiva.
Por otro lado, hacer públicas las percepciones personales suele costar caro. Sin embargo, sostengo hasta el final que será Armenta; no falta mucho para saberlo. A finales de este año se definirán candidatos de todos los Partidos para ser votados el 2 de junio de 2024. Se elegirá al presidente de la República número 66, sucesor de Andrés Manuel López Obrador; 128 senadores y 500 diputados federales; 31 congresos locales; 1,580 ayuntamientos; 16 alcaldías y 24 juntas municipales.
Elección monstruo nunca vista, estimándose que más de 95 millones de mexicanos acudirán a las urnas.
El escenario en Puebla es complicado para otros aspirantes, sin demeritar sus cualidades, tales son los casos de Julio Huerta Gómez, Eduardo Rivera Pérez, Ignacio Mier Velazco y Blanca Alcalá Ruiz, observando que la priista declinó hace meses por el panista.
En el caso de Ignacio Mier y Eduardo Rivera, su desesperación es evidente. El primero, hasta habla de impulsar una iniciativa en la Cámara Baja para que el legado de grandeza del fútbol mexicano sea restaurado y, así, evitar el ridículo en el mundial de 2026.
Esta declaración es el colmo de la farsa, pues argumenta que eso se logrará construyendo más estadios y fomentando el deporte. La ignorancia y mentiras del protector de delincuentes es monumental, mereciendo un espacio aparte.
El segundo, tendrá que explicar su fallida gestión como presidente municipal de Puebla de 2011-2014, donde se aprobó la privatización del agua potable con altos costos, hasta la actualidad, para los poblanos; el haber gobernado arrodillado ante Rafael Moreno Valle Rosas y haber hecho acuerdos oscuros con el morenovallismo, incluido Antonio Gali Fayad, que le valieron ser perdonado de su inhabilitación por 12 años de la función pública, la sanción económica por 25 millones de pesos y los actos de corrupción encontrados en su cuenta pública de 2013.
Y falta su administración actual 2021-2024, que tendría que dejar inconclusa para competir por la gubernatura, no sin antes desglosar su política recaudatoria con programas reprobados, como los parquímetros, que han perjudicado los bolsillos de los ciudadanos.
POSDATA: El senador Alejandro Armenta Mier, es garantía de triunfo electoral en 2024. Lo demostró desde 2018, obteniendo un millón 500 mil votos, 350 mil más que la ganadora de la elección de gobernador, Martha Erika Alonso Hidalgo, a pesar de la persecución morenovallista y de todo el aparato oficial complementado con el manejo de cientos de millones de pesos.
Como presidente de la mesa directiva del senado, se mueve en la alta esfera política, es uno de los legisladores más productivos y su caminar cerca de la gente en el Estado poblano le vale la multiplicación masiva de seguidores.
POSDATA 2: La experiencia financiera y política del diputado poblano Jorge Estefan Chidiac, no pasa desapercibida y no está para ser desperdiciada.
POSDATA 3: Si usted me pregunta hacia dónde inclinará el magisterio su simpatía por alguno de los aspirantes a la gubernatura poblana, le puedo responder que su atención, como buenos maestros, está en la A, letra número uno del abecedario y si es doble AA, mejor.