Las misiones comerciales son fundamentales para la promoción de productos, conocer avances tecnológicos de otras latitudes y atraer inversión extranjera, esta última tan necesaria para la creación de empleos en beneficio de amplios sectores poblacionales.
Como poblano, reconozco y felicito al Gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina; al Gobernador Electo, Alejandro Armenta Mier; y, al Presidente Municipal Electo de Puebla, José Chedraui Budid, por la misión realizada a Alemania y España, junto con empresarios poblanos.
En tan solo dos años, Sergio Salomón Céspedes le dio un giro total a la relación entre gobierno y sociedad promoviendo la unidad entre los poblanos, generando una gran cercanía con la gente, fomentando la inclusión social, y realizando obras y acciones prioritarias para el desarrollo de las diferentes regiones de Puebla. En poco tiempo hizo una gran diferencia que lo pone entre los gobernadores mejor evaluados y reconocidos del país.
Por otro lado, la armadora automotriz alemana Volkswagen (VW), se convirtió en el motor de la actividad económica de Puebla, al aportar el 40% del Producto Interno Bruto (PIB); 25% de manera directa y 15% a través de su cadena de proveedores, constituida por 75 empresas, según datos de Miguel Hernández, en El Economista.
De acuerdo con la misma fuente, VW emplea a 16 mil poblanos de manera directa y a otros 35 mil de la industria de autopartes, por lo que es fundamental generar confianza, dar certeza jurídica y facilidades para el desarrollo de su objeto social, lo cual, se asegura con la presencia del Gobernador Electo, Alejandro Armenta, en esta misión.
Adicionalmente, a la fabricación, venta y exportación de automóviles, algunos muy populares como el “Vocho”, la empresa VW ha estado ligada a proyectos ambientales como la reforestación para la recarga de acuíferos en la región Ixta-Popo.
Asimismo, y derivado de fabricar la camioneta Tiguan, en 2014, VW requería un proyecto ecológico para mitigar el impacto contaminante, de acuerdo con las leyes ambientales. Los responsables se acercaron a la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA) Puebla, y analizamos opciones.
Resultado de lo anterior, se acordó desarrollar conjuntamente un proyecto de plantación, procesamiento y comercialización de bambú en la Sierra Nororiente, el Campo Experimental “Las Margaritas”, bajo la administración del Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias y Forestales (INIFAP).
El bambú hace bosques productivos renovables de corto plazo; puede aprovecharse desde los dos años.
A partir de 2016, se plantaron un total de 330 hectáreas de bambú y un plan de acciones para la industrialización y comercialización de los derivados en beneficio de las comunidades, con una inversión cercana a 10 millones de pesos. Esto dio un nuevo impulso al desarrollo de esta cadena productiva iniciada en el año 2000, con el apoyo del Gobernador Melquiades Morales Flores, en respuesta al desbordamiento del Río Apulco, en la Colonia Morelos, Tenampulco, provocado por las lluvias torrenciales de 1999 en la Sierra Nororiente.
La comunidad pidió entonces, protección contra nuevos desbordamientos del río y se estableció una barrera viva de 2 kilómetros de bambú, siendo la primera cortina protectora contra desbordamientos de ríos en América Latina. En tan solo solo tres años se empezaron a utilizar las varas en diversas aplicaciones como palapas, corrales, viviendas o elaborar artesanías. Hoy existen más de mil hectáreas de bambú en más de 100 municipios poblanos.
Organizaciones como Tosepan y los Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura en el Banco de México (FIRA), hicieron grandes aportes al desarrollo del bambú poblano. Además, se crearon la Unión de Productores y el Consejo Poblano del Bambú. Se enviaron técnicos a Colombia, se firmaron acuerdos de cooperación y se trajeron expertos colombianos para apoyar a nuestros productores.
En 2007, en el marco de la Feria Mundial del Bambú en Hang Zhou, China, se firmó un acuerdo de cooperación técnica entre la Secretaría de Desarrollo Rural de Puebla y el Instituto Nacional Chino del Bambú, para la preparación de jóvenes poblanos.
Agradezco a los poblanos que creyeron en esta alternativa y que hoy con gran orgullo producen varas de bambú para diversos usos: postes para cultivo de uva, reglillas, derivados de papel, vigas industriales, palapas, corrales, casas, invernaderos, bodegas, brotes para consumo alimenticio, cerveza de bambú y palillos de diferentes dimensiones. Grupos de trabajo de BUAP, ITESM, UPAEP, UDLA e ITST, han tenido grandes aportes.
No obstante lo anterior, se requieren reforzar los apoyos a esta cadena productiva de importancia forestal, una gran opción contra cambio climático, captación de bióxido de carbono (CO2) y pobreza, gran generadora de empleo comunitario.
Necesitamos Pensar en Grande para contar con una superficie mínima de 5 mil hectáreas y un plan de acciones de industrialización y comercialización para integrar al bambú al desarrollo nacional, construcción de vivienda digna y también para abastecer mercados internacionales, especialmente Norteamérica y Europa, con productos maderables, pisos laminados, estructuras, carbón de bambú como sustrato agrícola, y junto con el pellet combustible, tener dos opciones de energía renovable.