Ya es oficial, Sebastian Vettel dejó de ser piloto de Ferrari desde esta mañana en la que el equipo emitió un comunicado en el que pone fin a las cinco temporadas, seis con ésta, en las que el alemán ha formado parte de la escuadra de Maranello.
MARCA adelantó que el alemán tenía un pie fuera de Ferrari cuando expire su actual contrato, a finales de esta temporada, tras rechazar la segunda oferta, a la baja, hecha por Ferrari para prologar el su relación contractual, iniciada en 2015.
La primera, tomada como “una broma”, suponía una rebaja sustancial de su sueldo (de 32 millones a los 9-12 de Charles Leclerc y una sola temporada), y la segunda tampoco convenció al alemán, que pedía tres y como poco dos, pese a que el jefe del equipo, Mattia Binotto, insistía en que era la primera opción del equipo.
La relación quedó rota, y Vettel, que ha logrado 14 victorias y 12 poles en Ferrari, se despedirá a finales de esta temporada del equipo donde no ha podido lograr su quinto campeonato y así seguir la estela de su ídolo, Michael Schumacher. Además, tendría difícil acomodo en otros equipos, como McLaren, donde su exjefe de la era BMW, Andreas Seidl, le contactó hace meses, como adelantó MARCA. Las pretensiones económicas de Seb, chocan con la situación actual del equipo de Woking, el principal defensor de la rebaja de los presupuestos de los equipos apenas a 100 millones.