· Las cenas decembrinas aportan más del 4 mil calorías, lo que significa el consumo de un mes por persona.
· Los alimentos que se comen en estas fechas son preparados con numerosos carbohidratos, azúcares y son capeados, por ello la sugerencia es sustituir algunos de estos por otros más sanos
Pavo, bacalao, lomo, romeritos, ensalada de manzana, chiles rellenos, postres y bebidas con alcohol, son parte de los platillos que se encuentran en la cena navideña y de Año Nuevo de los mexicanos. Sin embargo, más allá de su variedad y buen sabor, están hechos de cientos de calorías que pueden aportar más de 4 mil 500 por persona, lo que ocasionan un sobrepeso de 4 a 5 kilos más del peso normal sin son consumidos en exceso.
Así lo dio a conocer la nutrióloga Amalia Pérez Mejía del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Puebla. Aseveró que uno de los principales errores es que, aprovechando la disponibilidad de diferentes alimentos, se come demasiado y se busca probar de todo hasta el punto de sentirse lleno, incluso incómodo. Aunado a esto, en esta época la actividad física disminuye drásticamente, pues en general mucha gente tiene vacaciones y prefiere descansar del gimnasio.
Otra de la variantes es que la mayoría de los alimentos que se consumen en estas fechas son preparados con numerosos carbohidratos, azúcares y son capeados, por ello la sugerencia es sustituir algunos de estos por otros más sanos, por ejemplo comer una ensalada de verduras sustituyendo la pasta, eliminar la mayonesa, la crema y únicamente beber una copa de alcohol.
Por otra parte, Pérez Mejía informó que las porciones indicadas por platillo son de 120 gramos, sin embargo cada uno tiene aportes calóricos diferentes, en el caso del pavo es de 550 calorías, lomo mechado 344 calorías, pierna adobada 375, la pasta 360 calorías, lo que equivale a las más de mil 800 calorías que se deben de consumir en el transcurso del día.
El ver mucha comida se come más, sin embargo, la combinación y recomendación es degustar en pequeñas cantidades, evitar refrescos de cola y bebidas con alcohol. A su vez también tomar en cuenta la preparación de los platillos en las personas o familiares que tengan alguna enfermedad crónica degenerativa, así lo informó la nutrióloga Pérez Mejía.
Por último informó que la alimentación es educación, no se trata de limitarse en su consumo, es comer en pequeñas porciones y que aporten nutrientes al cuerpo.