El abogado poblano, Miguel Ángel Martínez Escobar se amparó ayer ente el Juzgado de Distrito de Amparo en Materia Civil Administrativa y del Trabajo y de Juicios Federales en el Estado de Puebla. El juicio de amparo es indirecto y solicita la protección de la justicia federal en contra del acto de las autoridades responsables, como son los dirigentes del Congreso del Estado de Puebla.
El acto reclamado es que Martínez Escobar fue excluido por el Congreso del Estado de la lista de los 16 aspirantes a la Fiscalía General del Estado. En su demanda, Martínez Escobar estuvo acompañado del abogado Atilio Alberto Peralta Merino, quien también es su representante.
Aparecen como terceros perjudicados Gilberto Higuera Bernal, José Carreón Herrera, José Miguel Arriaga Bulloli, Zacarías Arriaga Cabrera Oliver, Gabriel Hernández Campos, Luis Cuauhtémoc Hidalgo Martínez, José Othón Bailleres Carriles, Guadalupe González Vargas. Maricela Pichón Acevedo, José Martínez Ramírez Carranza, Juan José Rodríguez Sánchez, José Carlos Andrés Lerín Díaz, Israel Eugenio Jiménez, Abdiel Lozano Chantes y Rosa Celia Pérez González, todo ellos aspirantes a la función de Fiscal General del Estado de Puebla.
Como autoridades responsables señala a la Junta de Gobierno y Coordinación Política y a la Presidencia de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso del Estado de Puebla, por haber desechado verbalmente la solicitud de aspirante a Fiscal General del Estado, presentada el 24 de enero en los términos de la Convocatoria expedida, sin mediar mandamiento por escrito y sin que hubiese agotado los procedimientos legales.
Asimismo, no medió notificación personal, como lo establecen las leyes violadas por el Congreso como la Constitución Política de México, la de Puebla, la Convención Americana de Derechos Humanos y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.
En síntesis, como dice el refrán que lo que mal empieza mal acaba. De entrada la elección del Fiscal General del Estado ya no será transparente y conforme a derecho.
La novatez y la ignorancia de los integrantes del Congreso de Puebla están a la vista.
EL IEE Y SU LABERINTO
Las esperanzas de cambio y democratización en el Instituto Electoral del Estado (IEE) con la llegada del nuevo Presidente, Miguel Ángel García Onofre, se han vuelto confusas.
En su declaración inicial García Onofre ofreció dotar de credibilidad al organismo, pero con la decisión aprobada en sus oficinas en lo oscurito para negar el registro como partido político local al Movimiento Antorchista Poblano (MAP), además de la presencia de fuerzas policiacas y la falta de transparencia, es posible que no haya un verdadero cambio.
Pareciera que en Puebla en algunas ocasiones se regresa a las más oscuras etapas del Gobierno de Rafael Moreno Valle Rosas.
Ya se anunciaron movilizaciones y juicios electorales. Como dice el filósofo… ¡pero qué necesidad!
El vocero del MAP, Aquiles Montaño Brito, a nombre del Comité Estatal del partido en formación denunció que el IEE no es un órgano autónomo y por tanto, trata de evitar la formación de un nuevo partido político en Puebla violando los derechos de más de 40 mil poblanos que ya se han afiliado.
Explicó que cinco de los siete consejeros electorales decidieron suspender el proceso de formación en partido político porque “creen que hemos violado la ley, pero eso no es cierto y por lo tanto, este proceso de registro lo vamos a llevar a los tribunales electorales, vamos a defender este proceso que fue validado en todos los detalles por el propio IEE”.
Creemos –continuó Aquiles Montaño- que podemos ganar esta batalla porque convencimos a miles de ciudadanos de que nuestra propuesta es correcta para Puebla, tenemos un plan de trabajo bien definido, estructurado que va a superar muchos de los males que aquejan al estado.
Esa defensa comienza ahora y vamos a dar esta lucha hasta donde tengamos que llegar, dijo finalmente.
Los barruntos de tormenta política asoman en el horizonte poblano. Y eso sin mencionar los dimes y diretes entre el Gobierno del Estado y la Universidad Autónoma de Puebla.
En fin, como escribió Antonio Machado (España, 1875-1939) en su Poesía del Camino:
Daba el reloj las doce… y eran doce
golpes de azada en tierra…
…¡Mi hora! grité… El silencio
me respondió: No temas;
tú no verás caer la última gota
que en la clepsidra tiembla.
Dormirás muchas horas todavía
sobre la orilla vieja,
y encontrarás una mañana pura
amarrada tu barca a otra ribera.
raultorress@hotmail.com