“Preocupa la escasa atención a la ciencia y tecnología en México, eso se puede ver en temas como el presupuesto asignado que debería haber aumentado y no sucedió”, la poca vinculación con la industria, el trato de las decisiones centralizadas y la inquietud por los saberes ancestrales, afirmó el Dr. Polioptro Martínez Austria, catedrático de la Universidad de las Américas Puebla, durante su participación en los Foros Regionales de Consulta sobre la Legislación Secundaria en Materia Educativa, organizados por la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, (ANUIES).
México atraviesa por un retraso enorme en ciencia y tecnología que debe ser atacado lo más pronto posible, por esta razón la ANUIES y la Secretaria de Educación Pública a nivel federal realizaron varios foros de discusión en diferentes ciudades, donde invitaron a autoridades educativas, especialistas y personalidades para cuestionar y deliberar propuestas que elaboren instrumentos normativos para la Ley General de Educación, del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros, de Educación Superior, de Ciencia, Tecnología e Innovación, y la ley que crea el Sistema Nacional de Mejora Continua de la Educación.
Cada una de esas fue analizada en mesas de trabajo, en una de ellas celebrada en Puebla el Dr. Martínez Austria expuso varios temas inquietantes. Por ejemplo, la idea de frenar a la ciencia en ciertas ramas para darle lugar a los saberes ancestrales; la toma de decisiones centralizada sin la participación de los investigadores, lo cual genera que no se enfoquen los esfuerzos hacia las grandes tendencias del conocimiento que generan bienestar y desarrollo económico en las sociedades. “No vemos una orientación clara del futuro de la ciencia en México, todos estos términos que utilizan como saberes ancestrales no son científicos, nadie sabe qué son o cuáles de ellos pueden ser valiosos para el avance del conocimiento”, explicó el director de la Cátedra UNESCO-UDLAP en Riesgos Hidrometeorológicos.
Entre los temas que mayormente agobian al catedrático del Departamento de Ingeniería Civil y Ambiental de la UDLAP, expuestos en su participación, están el manejo de recursos y la poca inversión, porque la mayor parte de los países desarrollados dan más del 2% de su PIB a la investigación, en México hay un exiguo .4%. Aunado a esto está la poca vinculación de la ciencia y tecnología con la industria, que “es necesaria para poder transitar desde la investigación básica a los prototipos tecnológicos, a la masificación de la tecnología”, comentó.
Como resultado, la ciencia en el país se quedará estancada por muchos años, mientras el resto de los países desarrollados están avanzando a pasos agigantados. Ante ello, el también editor general de la revista Entorno UDLAP, exhortó a las autoridades competentes a entender que las voluntades deben ir encaminadas hacia el apoyo a la investigación, pues hay una correlación directa entre desarrollo tecnológico, la ciencia y la prosperidad. “Los países que gozan de mayores índices de bienestar humano son aquellos que han estado invirtiendo mucho más en ciencia y tecnología; porque estamos en una sociedad del conocimiento, donde el valor de la economía está ligada al conocimiento que está introduciéndose a los bienes y servicios”, expuso.