LEGITIMIDAD

Diario ABC Puebla

La doctora Lilia Cedillo Ramírez tendrá la oportunidad de cerrar con broche de oro su ciclo como rectora de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, no solo porque, a pesar de las vicisitudes, ha sabido mantener la estabilidad y el progreso en una de las instituciones más importantes del país, dejando atrás los años oscuros que la enmarcaban entre le conflicto y la baja calidad académica.
Llegará a su segundo período totalmente legitimada, después de una jornada electoral competida y eso es precisamente lo que le da autenticidad, veracidad, licitud.
Mañana inicia una nueva era y si no hay ningún cambio, informará logros y proyectos, además de rendir protesta en las instalaciones del Museo Internacional del Barroco que, hoy, pertenece a los poblanos después de la formidable negociación del gobierno de Alejandro Armenta que desactivó una deuda infame vigente hasta el año 2039.
La democracia se respiró en los comicios de la BUAP; la participación fue abundante; las peticiones de mejoras en la academia no faltaron y continuarán. Existieron las protestas de grupos antagónicos que han querido desvirtuar el proceso hasta el último momento, remarcándose las necesidades de los estudiantes que dividieron su voto. Esto último marca un reto a Lilia Cedillo.
Por eso ha reforzado su equipo, centrando la atención en el fichaje del maestro Damián Hernández Méndez, quien será el nuevo secretario general de la institución.
Esto generó suspicacias entre los eternos inconformes que nada les llena; sin embargo, hay que decirlo, Damián Hernández es uno de los hombres que conocen perfectamente las entrañas de la universidad, gusta del diálogo y la negociación, atributos que no todos pueden presumir.
Ha sido un acierto la decisión de la rectora Lilia Cedillo y a eso deberá responder Damián Hernández, sin demeritar a ninguno de los integrantes del equipo de la investigadora.
Soplan otros vientos en la BUAP que, hoy como nunca, goza de una infraestructura que no soñaba en las décadas de los 60, 70, 80 y 90, siendo la academia y la estabilidad la que dé lustre.
POSDATA: La relación institucional entre la BUAP y el gobierno de Alejandro Armenta existe, cada uno en sus responsabilidades, pero es obligada, de apoyo, de respeto mutuo y de alta consideración política. Aquellos que quieran desvirtuarla caerán en la equivocación; el cisma que añoran nunca tendrá éxito.
POSDATA 2: Ahorita mismo la policía estatal y municipal, el grupo K9 y la Fiscalía del Estado tienen activado un operativo de seguridad en las instalaciones universitarias, después de que se detectaron mensajes violentos en redes sociales de un perfil que mencionaba un posible atentado en la facultad de Ciencias de la Computación.
Ojo: Esto no es violentar la autonomía universitaria, es un esfuerzo conjunto de colaboración entre la BUAP y los tres niveles de gobierno que garantiza la seguridad de estudiantes, maestros, personal administrativo y trabajadores de la BUAP.
POSDATA 3: El deschavetado Rodolfo Ruiz Rodríguez, su medio e-Consulta y sus mascotas croqueteras arremeten un día sí y otro también contra el gobierno de Alejandro Armenta. Es lo único que existe en sus locuaces críticas. Según ellos, los demás entes de gobierno son perfectos, así como su alma mater la UPAEP, centro de escándalos, como el último del feto abandonado al interior de sus instalaciones.
Su última campaña trasnochada sobre la plataforma Nódica es un fracaso, teniendo que recurrir a sus padrinos de medios nacionales para hacer escándalo, es el caso de Julio Hernández y Ciro Gómez Leyva, quienes no han tenido el tino de investigar si su “corresponsales” están diciendo la verdad o son una recua de mentirosos.
¿O es que Julio y Ciro están dolidos porque no los atienden como los reyes de la comunicación que siempre se han creído y recogen cualquier versión para golpear?
A la recua compuesta por Rodolfo y sus croqueteros, les ha dado por asegurar la salida de José Tomé Cabrera de la coordinación de comunicación social del gobierno de Puebla, nada más porque así lo quieren, conviniéndoles que sus compadritos y sobrinos se adueñen de esa área, como lo están haciendo en otras relacionadas con medios periodísticos.
A la recua se le olvida que el trabajo y la lealtad cuentan; que la administración actual no está para satisfacer odios y ambiciones desquiciadas.
Por cierto, Rodolfito ha pasado por alto que hay denuncias penales y administrativas que no caducan a conveniencia. Y creo que él tiene algunas que solamente estaban archivadas y empolvadas; solo hay que sacudirlas.