En juego dominado por las defensivas se erigió la figura de Wil Lutz con los New Orleans Saints, quien con su efectividad como pateador encaminó la ajustada victoria 10-12 sobre los Dallas Cowboys, en duelo por demás dramático en el cierre, dentro de la actividad dominical de la Semana 4 de la NFL.

Los locales no iniciaron como hubieran querido, ya que en su última oportunidad en su primera opción, Teddy Bridgewater logró ser interceptado, lo que impulso la ofensiva de Dallas en buena posición. La defensiva trataría de detener a Dak Prescott y compañía, y lo lograrían a medias, ya que Brett Maher adelantaría a los suyos con el gol de campo.

Bridgewater lograría reaccionar casi al final del primer cuarto, y pondría a su ofensiva en zona roja, pero un par de castigos los llegó a poner en 3ra y 29. Solo les alcanzó para el intento de gol de campo, efectivo por Wil Lutz.

Tras la paridad en el marcador, los Saints lograron tomarle la medida a la defensiva visitante, sin embargo no lograrían hacerle el daño deseado. Un gol de campo de 42 yardas, y otro de 19, jugada, generada tras un fumble de Elliott le daría la ventaja a los Saints 3-9 al medio tiempo.

Lo cerrado de ambas defensas, parecía que haría que el resultado no tuviera sonadas modificaciones, fue entonces cuando llegó la figura de Prescott, quien tuvo que llegar por tierra para llegar a zona de anotación, y darle la ventaja a Dallas por segunda vez en el partido.

Lamentablemente la alegría le duraría poco al equipo de la estrella solitaria, ya que de nueva cuenta Lutz, ahora con una patada de 26 yardas le devolvería la ventaja a los Saints.

Bridgewater y compañía trataron de asegurar la victoria alargando en demasía la ofensiva, pero no evitaron que la visita tuviera una última opción después de la pausa de los dos minutos. Lamentablemente Prescott no pudo sacar el pase ganador, y coronó una mala noche con un ave maría interceptado con el reloj ya en ceros.

De esta manera se firmó la tercera victoria de Saints en la campaña, mientras que para Dallas fue acabar con su invicto de tres triunfos al hilo.