Apenas está planteando el Partido Revolucionario Institucional su reestructuración, como si no se diera cuenta que cayó en desgracia, arrastrado no sólo por la ola morenista, sino por la corrupción y soberbia que se metió hasta el tuétano en muchos de sus liderazgos.

Para darse una idea del panorama que enfrentará a nivel nacional el otrora poderoso Partido, irá a parar al quinto lugar en la Cámara de Diputados como fuerza política, desbancado por Acción Nacional, el Partido del Trabajo y Encuentro Social.

No es cuento chino.

Mire usted: Con la información difundida por el Instituto Nacional Electoral (INE), se prevé que el Congreso quedará repartido de la siguiente manera: MORENA con 246 legisladores; el Partido Acción Nacional (PAN) con 104; el Partido del Trabajo (PT) con 67; el Partido Encuentro Social (PES) con 64; el Revolucionario Institucional (PRI) con 59; Movimiento Ciudadano con 34; el Partido de la Revolución Democrática (PRD) con 29; el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) con 22; y Nueva Alianza con 3.

Abran bien los ojos, porque el Partido del Presidente Enrique Peña Nieto será la quinta fuerza legislativa en la Cámara de Diputados, aunque en el Senado la configuración cambia, porque alcanzará el tercer lugar.

Y aún deshojan la margarita sobre el futuro de los que traicionaron al PRI.

En Puebla, por ejemplo, el Regidor Iván Galindo dice que para que alguno de los militantes tramposos sea sancionado por la Comisión de Justicia Partidaria, es necesario que los acusadores presenten las pruebas de que jugaron con “doble cachucha”.

Por favor, eso es para ingenuos.

Y si agregamos que Pablito Fernández del Campo es el que parte el queso en la Comisión de Justicia Partidaria, lo mejor es que la militancia se vaya a dormir a su casa y que se olvide de una limpia en el PRI que se viene anunciando desde el año 2000.

Las evidencias saltan a la vista, pero como se trata de hacerse tontos, todo seguirá igual: El Partido continuará siendo usado como moneda de cambio y a la verdadera militancia se le cuece con engaños y falsas promesas.

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NO SE VAYA usted a espantar o le dé por mentar madres. Más vale beber un té de tila antes de leer lo siguiente:

Tras acabar el plazo de un año que un Juez federal dio para investigar, la PGR acusó formalmente al ex Gobernador de Veracruz Javier Duarte de lavado de dinero y asociación delictuosa y pidió que se abra juicio en su contra. No obstante, la Procuraduría retiró el cargo de delincuencia organizada que le había imputado inicialmente y que era el único que ameritaba su prisión preventiva automática.

La PGR dio a conocer, ayer miércoles, a través de un comunicado, que al valorar las pruebas contra Duarte “determinó que no son suficientes para acreditar el delito de delincuencia organizada, por lo que decidió reclasificar la acusación”.

Esto quiere decir que se abre la posibilidad a los Abogados de Duarte para que soliciten al Juez que retire la medida de prisión preventiva impuesta a su cliente y así pueda enfrentar el juicio en libertad.

Así se las gastan quienes ejercitan el nuevo Sistema Penal Acusatorio.

El manoseo de pruebas, la falta de aportación de las mismas, las omisiones, los enjuagues, no seguir las reglas del proceso, permiten resoluciones increíbles.

Nada espanta.

La indignación de los mexicanos es lo de menos, vale para un carajo.

Corrupción e impunidad, repuntan.

¡Qué barbaridad!

directorabcd_reflexiones@yahoo.com.mx