REFLEXIONES
(Periodismo con Historia)
*Por: Miguel Ángel García Muñoz
Vivir, es el máximo derecho del ser humano desde el inicio de los tiempos.
No siempre respetado, muchas veces vulnerado.
Es mi punto de vista.
Cada cual tendrá el suyo.
El aborto como tal, constituye un asesinato.
Quizá alguna causa excepcional podría caber en su justificación.
Pero no es el feminismo, como doctrina o movimiento político, el que puede persuadir para hacerlo válido en la sociedad a través de la presión, la amenaza o el acomodamiento de la norma o el convencionalismo. Una cosa es la exigencia de la mujer a tener los mismos derechos del hombre ante la ley y otra disponer de una vida ajena que existe desde la concepción biológica.
El concepto feminismo debería estar ligado a la sensatez, ecuanimidad, razonamiento, concordancia, solidaridad, hermandad, no confundirlo con hembrismo radicado en la aversión o discriminación contra los hombres, lo que vendría a ser una analogía del machismo maltratador de la mujer.
Toda mujer tiene la libertad de hacer de su cuerpo lo que le plazca y de percibirse como quiera o le convenga, pero no puede exigir al Estado que legisle en la legalización del aborto, argumentando una política “progresista” que más bien se asemeja a un retroceso a la barbarie; ni tampoco nada le ampara en la exigencia de ser valorada conforme a su falsa autopercepción, pidiendo castigo para todo aquel que no acepte su visión distorsionada.
¿Por qué no hablar de prevención sexual?
¿Por qué no descubrir a los grupos y fundaciones que pagan mucho dinero para conformar el radicalismo feminista que ve en los hombres a sus enemigos?
¿Por qué se pretende enterrar la fe religiosa que mitiga la sed en el milagro de la existencia?
No todos son ateos o agnósticos.
¿Por qué no se habla del máximo derecho del ser humano que es la vida, pugnando por la muerte antes de nacer?
¿Por qué no se afirma que el hombre o mujer tienen vida propia desde su concepción biológica y que solamente forman parte del Estado al nacer y ser registrados sin perder su independencia?
¿Por qué no se debate sobre mejores formas de controlar la sobrepoblación del mundo, en lugar de matar a seres inocentes o creando guerras mundiales?
¿Por qué no remarcar que en el ser humano existen dos géneros, en lugar de inventar que hay 68?
El tema da para mucho.
Esta es una simple opinión.
POSDATA: El aborto no es un asunto de derecha o de izquierda ni de Morena ni del PRI ni del PAN ni del PRD ni de cualquier otro Partido. Es de principios, valores, ciencia, honestidad, legalidad y justicia.
No quieran ganar votos aprobando matar niños antes de ver la luz del mundo. Sólo los inadaptados lo aplaudirían.
¡Dios me libre de una generación idiota!
POSDATA 2: Algunos colectivos feministas han querido arremeter contra la opinión del senador Alejandro Armenta Mier, quien dijo que “la mujer ejerce su derecho sobre su cuerpo y tenemos que respetarlo; pero también, en esa línea delgada, tenemos que respetar el derecho a la vida”.
Quizá pudo ser más extenso y explícito.
Sin embargo, es fácil entender lo que quiso decir, que no es otra cosa que respetar a la mujer en lo que decida hacer sobre su cuerpo, es correcto, pero no en la vida de otra persona. Y esto incluye respetar su autopercepción si se ve como un hombre o transexual o bisexual o un animal, pero no obligar a otra persona a que la vea de esa forma y menos acusar de discriminación o violencia de género distorsionando la realidad.
En el mismo caso están los hombres que se perciben como mujeres o lo que su mente fabrica.
POSDATA 3: Respetar el derecho a la vida, es la máxima facultad del ser humano, garantía insustituible.
POSDATA 4: Rafael Moreno Valle Buitrón, se ha incorporado abiertamente al equipo de trabajo del senador Alejandro Armenta Mier.
La ideología, la percepción de la política, la simpatía, la amistad, un proyecto, la definición sin dobleces, es lo que los identifica.
Rafa, como le dicen sus amigos, juega abierto, lo que no todos pueden presumir.
Y si alguien lo dudaba, va por la consolidación en Puebla del Partido Fuerza por México, porque superó el porcentaje del 3 por ciento en la votación, algo que no pueden soslayar los tribunales electorales.
directorabcd_reflexiones@yahoo.com.mx