Cada año el cáncer de mama produce cerca de dos mil millones de casos nuevos y 627 mil muertes. En México es el tipo de cáncer más frecuente entre las mujeres con alrededor de 28 mil casos y con un aumento en la incidencia y mortalidad dado por los cambios en el estilo de vida, indica la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Por ello, es importante conocer cuáles son las señales de alarma y saber qué hacer y a dónde acudir cuando se sospecha de cáncer de mama.
Señales de alarma
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) señala que algunas de las señales más importantes que deben entenderse como indicadores de cáncer de mama, son:
- El “bulto” o “bolita” puede presentarse en el pecho o en la zona de la axila
- Hinchazón de una parte o del todo el seno
- Irritación o hendiduras en la piel
- Retracción o contracción de los pezones
- Enrojecimiento
- Descamación o engrosamiento de la piel del seno o pezón
- Secreción del pezón que no sea leche materna
Prevención del cáncer de mama
El diagnóstico temprano del cáncer de mama aumenta la posibilidades de recuperarse totalmente de esta enfermedad. De ahí que sea de suma importancia la educación de la población sobre los signos y síntomas de la enfermedad, así como la autoexploración y la realización de exámenes de diagnóstico temprano como las mastografías.
Autoexploración mamaria, ¿cómo hacerla?
Según la UNAM, la autoexploración debe realizarse a partir de los 18 años y en el caso de las mujeres premenopáusicas, siete días después de la última menstruación.https://d-32569663512354546788.ampproject.net/2209142312000/frame.html
Ésta consiste en revisarse frente a un espejo para ver si no se tiene enrojecimiento de la piel, palparse los senos y las axilas buscando algún nódulo o secreción inusual del pezón.
También se recomienda realizarse una mastografía de preferencia con ultrasonido cada año después de los 40 años, y en población con riesgo genético después de los 30 años. Si se sospecha de cáncer, se procede a una biopsia, estudios de sangre, radiografía de tórax, y en sospecha de tumores más grandes se piden estudios de extensión, indica la UNAM.
Factores para reducir el riesgo
- Practicar la lactancia materna por más de 12 meses
- Consultar al médico sobre el uso de anticonceptivos orales
- Llevar una dieta rica en frutas y vegetales por su alto contenido de vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes
- Reducir el mínimo el consumo de grasas, azúcar y alcohol
- Mantener un peso adecuado
- Realizar actividad física al menos 30 minutos al día
- Autoexploración de las mamas después de los 25 años
- Realización de mastografía, después de los 40 años
¿Qué hacer si se sospecha o padece cáncer de mama?
En primer lugar es necesario acudir a un clínica o centro de salud cercano para detectar un posible índice de cáncer de mama. Si en este primer filtro se observa una posibilidad, se puede canalizar a la mujer a algunos de los Centros Estatales de Cáncer, localizados en varias entidades del país.
Estos nosocomios atienden los casos que son canalizados tanto del sistema de salud pública como del seguro social.
¿Dónde atienden casos de cáncer de mama?
Algunos lugares en México donde se atiende a pacientes con cáncer de mama son:
- Hospital Juárez
- Hospital General de México
- Instituto Nacional de Cancerología
- Instituto Mexicano del Seguro Social
Las mujeres inscritas al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) o Seguro Social o alguna otra institución gubernamental que ofrece el Estado mexicano, tienen acceso a la consulta y tratamiento contra el cáncer de mama.
Además, existen organizaciones encargadas de dar asesoría y tratamiento sobre esta enfermedad, como la Fundación de Cáncer de Mama (Fucam).
Mortandad en México y en el mundo
En México, entre una y dos mujeres al día mueren por causa del cáncer de mama, lo que la ubica como la primera causa de deceso en las mujeres en edad reproductiva.
Según, la UNAM entre el 5% y el 10% de los casos son producto de una anomalía heredada de la madre y el padre, en cambio el 85% al 90% tienen su origen en anomalías genéticas vinculadas al proceso de envejecimiento y al “desgaste natural” de la vida.
A nivel mundial la Organización Mundial de la Salud (OMS) informa que cada año se diagnostican 1.38 millones de nuevos casos y ocurren 458 mil muertes por este padecimiento.