Los Pueblos Mágicos, de acuerdo con la Secretaría de Turismo, son localidades que tienen atributos simbólicos que representan una gran oportunidad de aprovechamiento en la rama. Sin embargo, un reporte del Consejo Nacional de Evaluación de Política y Desarrollo Social (Coneval) reveló que siete de ellos se encuentran en situación de pobreza.
Los lugares que entraron en este ranking son Maní, Sisal, ambos en Yucatán, Santa María Juquila, Oaxaca; Tetela de Ocampo, Puebla; Paracho Verduzco, Michoacán; Santa María del Río, San Luis Potosí e Ixtapan de la Sal en Estado de México.
De acuerdo con El Universal Sisal cuenta con 17,238 personas en pobreza, lo que representa el 56% de su población. En Maní, ese porcentaje es del 78%, 4,444 habitantes.
Mientras tanto, en Paracho de Verduzco el panorama no es mucho mejor. El 69% de sus habitantes están en esta condición. En Santa María Río el porcentaje es de 60% e Ixtapan de la Sal, 57%.
Estas cifras representan un incremento en los números que habían sido registrados hace cinco años, de acuerdo con el medio mexicano.
Fue en 2001 cuando comenzaron a llamarse Pueblos Mágicos a aquellos lugares que pudieran funcionar en estrategia para desarrollar el turismo, la cual se orientaba en fomentar una oferta complementaria y diversificada al interior del país.
A través de videoconferencia, Miguel Torruco, titular de Sectur, señaló que con estos nombramientos se busca detonar el turismo local, el segmento con mayor potencial de recuperación ante la pandemia:
El turismo interno será el gran motor en esta etapa de recuperación del sector turístico, y en esa dinámica los Pueblos Mágicos se configuran, hoy más que nunca, como pilares de la economía regional y nacional
Reiteró que el turismo hoy se transforma para mejorar la calidad de vida de las comunidades receptoras, al tiempo de brindar “la mejor experiencia” al visitante.
Los nuevos nombramientos se dan luego de que la Sectur creara reglas más estrictas para los Pueblos Mágicos, pues sólo 16 de los 121 municipios evaluados en 2019 cumplieron con la totalidad de los requisitos para su permanencia.
De acuerdo con EFE, el Gobierno de México presentó el 23 de julio un plan de impulso al sector hotelero para sortear la crisis de la COVID-19 que consistirá en prestar 11,400 millones de pesos (unos 550 millones de dólares) a estos establecimientos a una tasa máxima del 13.5% de interés.
Pese a los apoyos al sector, México acogió en septiembre un 39.7% menos de turistas internacionales que en el mismo mes de 2019, al pasar de algo más de 3 millones a unos 1.8 millones de viajeros por la pandemia de COVID-19, y pese a que ese era el cuarto mes desde que comenzó la reapertura económica del país.