Desde los comienzos de un niño con un talento natural, inmerso en la gran pobreza, hasta la despedida en su Boca casi 20 años después. Traicionado, utilizado, generador por igual de simpatías y antipatías hacia su persona, el Maradona futbolista no dio pie a debates ni discrepancias.
‘El Diego’, que ha fallecido este miércoles de una parada cardiaca a los 60 años de edad, unánimemente considerado genio indiscutible en la historia del fútbol mundial, ha dejado un sinfín de perlas con su tendencia a darle a la ‘sinhueso’ sin importarle lo más mínimo las consecuencias.
Aquí están algunas de esas frases, tratando de abarcar en lo posible las dos décadas en las que el ’10’ fue el estandarte y partícipe de algunos de los escasos momentos felices del pueblo argentino.
La paz de la pelota
“A mí, jugar a la pelota me… me daba una paz única. La cosa era correr atrás de ella, tenerla, jugar. Y esa sensación la tuve siempre. Dame una pelota y déjame hacer lo que yo sé, en cualquier parte”
Sobre su infancia en Villa Fiorito
“Con Los Cebollitas les ganábamos a todos los que se nos cruzaban. Estuvimos 136 partidos sin perder. ¡Cómo jugábamos! Y a mí ya me sacaban fotos”
Los Cebollitas.
“Entré en el arranque del segundo tiempo. En el borde de la cancha, Montes me dijo: ‘Vaya, Diego, juegue como usted sabe… y si puede, tire un caño’. Le hice caso: recibí la primera pelota de espaldas a mi marcador, Cabrera, le amagué y le tiré la pelota entre las piernas. Pasó limpita y escuche el ‘Oooole’ de la gente como una bienvenida”.
Debut con Argentinos Juniors ante Talleres, el 20 de octubre de 1976, diez días antes de cumplir los 16 años.
“Creo que podría haber jugado en el Mundial 78. Lloré mucho. A Menotti no lo perdoné ni lo voy a perdonar nunca, pero jamás lo odié. Me había propuesto una revancha… Y en Japón lo cumplí”
Campeón del Mundo sub 20 en Tokio 79.
“El Loco Gatti, pobre. Había dicho que yo era un gordito. No sabía que la bronca era mi combustible. Cyterszpiller me pidió que le hiciera dos goles y yo le dije: ‘No, cuatro le voy a hacer’. Cuatro le hice”
9 de noviembre de 1980. Cancha de Vélez. Argentinos Juniors 5 – Boca Juniors 3
“El pase a Boca lo inventé yo… ¡Boca no tenía ni un sope para pagarme! ¡Qué colores, por Dios!
Fichaje por Boca Juniors en 1981.
“Mi primer Mundial arrancó mal, muy mal. Y así terminó también. Gentile fue mi sombra. ¡Pero cómo pegaba esa sombra! Muchos años después el ‘tano’ me reconoció que con un arbitraje serio él no hubiera aguantado en la cancha más de 20 minutos. ¡Me cagó a patadas!”
Mundial de España 82.
“El momento más doloroso de mi carrera. En la camilla, fracturado. Yo ya sabía, ya sabía. Había sentido el ruido después de la entrada de Goikoetxea. Ruido a madera rota. Y el dolor, terrible. Nadie se imaginaba que tres meses después estaba volviendo a una cancha”.
Grave lesión por la entrada de Andoni Goikoetxea en un Barcelona-Athletic.
Núñez fue el culpable de todo lo que pasó en Barcelona, el único culpable. El tipo jamás se bancó que él no podía ser nunca más importante que un futbolista. Y me persiguió, como a otros”.
FC Barcelona 82-84
“Cuando llegué a Nápoles estaba en cero… y con deudas. Hice cualquier cosa. Mis años en Italia fueron espectaculares. Al aterrizar me enteré de que en la temporada anterior el Nápoles se había salvado del descenso por un punto. Por eso nadie me creía cuando decía que saldríamos campeones. Lo logré en la temporada 86/87. La fiesta de San Paolo fue inolvidable”
Los años dorados en el Nápoles.
“El momento más sublime de mi carrera, el más sublime. Cuando estaba ahí, con la Copa del Mundo en las manos, sentía que tocaba el cielo. Que todos mis sueños se habían hecho realidad. Y también pensaba en lo felices que estarían todos los argentinos. Pese a todo, lo digo. Aquella fue una selección perseguida. Pero fue una selección mía, mía en todo sentido”
Campeón del Mundo en México 86.
“La mano de Dios. Je, je… Ni los fotógrafos pudieron ver qué pasó. Y Shilton, que saltó con los ojos cerrados, se ofendió y no me invitó a su partido de despedida. Me gustó ese gol, casi tanto como el otro. Sentí que le estaba robando la billetera a los ingleses después de las Malvinas”
Argentina 2 – Inglaterra 1. Cuartos de final Mundial de México 86. Primer gol.
“Qué más puedo decir de ese gol. Simplemente esto: lo soñé, lo soñé en Fiorito, lo soñé en los potreros, cuando no tenía ni zapatillas para jugar. Y lo hice en un Mundial, contra los ingleses. Arranqué allá atrás, en mitad de la cancha. Y después encaré, encaré, encaré… y la metí”
Argentina 2 – Inglaterra 1. Cuartos de final Mundial de México 86. Segundo gol.
“Éramos carne de cañón, éramos carne de cañón porque habíamos sacado a Italia. ¿Se nota bien lo que dije durante el himno, no? ¡Hijos de p…! Lo hice a propósito para que todos se dieran cuenta. No podía aceptar que hubiera gente que se alegrara con mis derrotas. Pero lo que más me jodió era que mezclaran a mi país y a mis compañeros”
Alemania 1 – Argentina 0. Final Mundial de Italia 90.
“Quiero terminar con esta historia de que Maradona inventó la droga en el fútbol argentino”
El escándalo de Nápoles y su enemistad con Passarella.
“Insisto aún hoy: me cortaron las piernas”
Positivo en el Mundial de EE.UU. 94
“Por favor, ¿qué número uno? Hoy por hoy soy el futbolista número diez mil, considérenme así”
Fichaje por el Sevilla.
“Volver a Boca fue como parir después de un embarazo de 14 años”
El adiós.
“Como jugador Pelé fue lo máximo, pero no supo aprovechar eso para enaltecer el fútbol. Sé que pudimos haber hecho muchas cosas juntos, pero somos demasiado distintos. Era una cuestión de piel, chocábamos demasiado. El problema fue que él se asustó con mi aparición y pensó que yo venía a quitarle algo que nunca quise. El número uno, el más grande, que la gente lo diga y que cada uno lo sienta”
Maradona y Pelé, enemigos íntimos.
“Yo hice lo que pude. Creo que tan mal no me fue. Sé que no soy nadie para cambiar el mundo, pero no voy a dejar que entre nadie en el mío a digitarlo, a manejarme. Nadie me hará creer, nunca, que mis errores con la droga o con los negocios, cambiaron mis sentimientos. Soy el mismo de siempre. Soy yo, Maradona. Yo soy El Diego”.
Epílogo de ‘Yo soy EL DIEGO”, autobiografía de Diego Armando Maradona.