Toni Kroos siempre habla claro. Concentrado con la selección alemana, el jugador del Real Madrid dio su postura sobre la futura SuperLiga Europea, que ha vuelto a saltar al primer plano de la actualidad tras confesar Josep María Bartomeu justo antes de abandonar el cargo que el Barcelona, ya está dentro del plan de los grandes clubes.
Kroos, sin embargo, no parece muy partidario de esta alternativa, durante el podcast ‘Einfach mal Luppen’. “Por desgracia, no lo decidimos como jugadores. Somos sólo títeres de la FIFA y la UEFA. Si hubiera un sindicato de jugadores, no jugaríamos una Liga de Naciones o una Supercopa de España en Arabia Saudí”.
Y va más lejos cuando habla de competencias como la Liga de Naciones o un futuro Mundial de Clubes: “Estas competiciones tratan de absorberlo todo económicamente, también exprimir a los jugadores físicamente. Pero soy un gran fan de dejar las cosas así cuando van bien. Las Ligas ya son top junto con la Champions League, el Mundial…”.
Kroos alerta que este proyecto es una amenaza para las Ligas nacionales y los clubes modestos admitiendo que deportivamente serían muy atractivas: “Desde un punto de vista deportivo, sin duda sería interesante porque solo habría partidos de alto nivel. Pero la brecha entre los clubes grandes y pequeños se ampliará aún más. No siempre todo tiene que ser más, más rápido, más y más dinero”.
El jugador del Real Madrid habló de las celebaraciones de algunos compañeros de profesión en el podcast que hace junto a su hermano Felix, que milita en el Eintracht. Puso de ejemplo la normalidad de Thomas Muller y no le gustan los festejos al estilo de Antoine Griezmann, que simula un baile de un videojuego, o de Pierre-Emerick Aubameyang, que llegó a ponerse una máscara de Spiderman. “Los bailes ensayados, las coreografías, lo veo una tontería. Algunas cosas acaban conmigo”, apuntó Kroos que habló de su estilo más comedido: “Eso no significa que sea menos feliz. Estoy muy feliz por dentro y un poco por fuera”.