El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se reunió este martes con John Rode III, un hombre al que presentó como el dueño de una tienda destruida durante las protestas contra el racismo y la brutalidad policial. Sin embargo, se trata de un antiguo propietario, ya que el actual declinó reunirse con el mandatario.

Tom Gram dijo al medio local TMJ4 News que él adquirió el negocio hace ocho años y que la Casa Blanca lo llamó el lunes para preguntarle si se uniría a la gira del mandatario en la ciudad que enfrenta un estallido social por el ataque con pistola hacia Jacob Blake, un hombre negro desarmado.

Según Gram, aunque su negocio fue incendiado la semana pasada, declinó la invitación porque “todo lo que hace [Trump] se convierte en un circo y yo no quería involucrarme en eso”.

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A pesar de su respuesta, el equipo de Trump invitó a John Rode III y el presidente lo presentó como el propietario de la tienda, quien elogió las medidas.

“Estamos muy agradecidos de tener a las tropas federales aquí. Una vez que llegaron aquí, las cosas se calmaron un poco “, dijo Rode y Trump respondió que “un día antes habría salvado su tienda”.

Aunque la familia de Rode fundó la tienda y a John le pertenece la propiedad, la tienda está a nombre de Gram.

El actual propietario dijo al medio que estaba decepcionado de que los comentarios de Rode III el martes fueran interpretados para reflejar las opiniones de los propietarios actuales.

“Creo que necesita unir a este país en lugar de dividirlo”, comentó y añadió que “hay mucha gente buena en esta comunidad y decir que solo la aplicación de la ley es correcta no es el mensaje que necesitamos escuchar en este momento”, dijo Gram.