REFLEXIONES
SERVIDOS, SEÑORES…
La frase se prestaba a la perfección para la ocasión.
No fue así.
Miguel Barbosa Huerta prefirió utilizar un mensaje mesurado, sensato, sin triunfalismos, convocando al diálogo, concordia y reconciliación.
Se pronunció triunfador de la contienda al filo de las 7 de la noche; el conteo rápido disipaba cualquier duda. En base a esto, dos horas más tarde el INE lo declaraba ganador, advirtiendo que los incidentes no perjudicaban en absoluto el proceso. Al filo de las 10.30 de la noche estaba listo el escenario en el zócalo de la capital para el festejo con la gente que lo condujo a una victoria contundente, de pronóstico anunciado que muchos no creyeron.
El corazón de Puebla es de MORENA; es de Barbosa, siempre acompañado de su esposa Rosario, cumpliendo su promesa de darle un beso al momento de saber el resultado favorable, en un acto poco usual que rompe paradigmas.
Yeidckol Polevnski se veía feliz porque es parte de ese triunfo; no obstante, el crédito se lo adjudicó a su amigo Miguel, a su campaña impecable, sorteando los obstáculos que querían verlo derrotado en todos los aspectos.
Alberto Jiménez Merino, candidato del PRI, aceptó los resultados sin queja alguna en muestra de respeto y civilidad.
Lo contrario se observó en el búnker del abanderado del PAN, Enrique Cárdenas Sánchez, quien aseveró que iba adelante en sus actas; luego, insistió que sólo lo separaban 3 puntos de Barbosa, en una estrategia encaminada a sorprender y preparar el camino a la impugnación, luego de que no pudo nivelar los comicios comprando sufragios y amenazando con su gente a los ciudadanos votantes
La farsa la llevó hasta el último momento, en una demostración tácita de que no quiere sentarse a platicar con el ganador.
O bien, pretende negociar, en una osadía desvergonzada después de la paliza.
No entendió el académico mentiroso que los votos que recibió fueron de la estructura panista, a pesar de que renegó del Partido que torpemente lo postuló por decisión del mediocre Marko Cortés y avalado por la Violinista Genoveva Huerta, teniendo la desfachatez de decir que no renunciarán a sus dirigencias.
Falta oficializar el resultado, pero es mero trámite.
No hay nada que ponga en riesgo la jornada calificada de limpia en lo general, a pesar del abstencionismo que fue en todas las entidades donde se realizaron elecciones.
MORENA es el triunfador del 2 de junio.
Baja California es el otro Estado que se vistió de marrón jugando la gubernatura, después de 30 años de jerarquía panista.
Puebla dejó atrás 8 años de pesadilla con Rafael Moreno Valle y 2 de Antonio Gali Fayad, siempre manejado por el primero. Se esperaba otro sexenio panista de la misma familia, luego del controvertido triunfo de Martha Erika Alonso, pero la tragedia se interpuso, escribiéndose una nueva historia desde ayer.
Miguel Barbosa tiene la oportunidad de convertirse en el mejor Gobernador de la historia de Puebla.
Es la herencia que va a dejar.
Es su palabra empeñada.
Es su convicción.
Su discurso, la fuerza de su pensamiento y la capacidad para tomar decisiones, son evidencias que generan confianza.
La cuarta transformación arranca en una entidad de suma trascendencia política en la república.
Se fortalece el Movimiento de Regeneración Nacional; se debilita el PAN; el PRD está en plena inanición; Movimiento Ciudadano resiente la catástrofe; el PRI se retuerce entre la división y los deseos de sobrevivir.
¡Miguel Barbosa es Gobernador!