** Llama Barbosa a acabar con esa cultura de adorar al gobernante.
A mí podrán llamarme Miguel porque soy un hombre que sueña, anhela y sufre como cualquier poblano, dice el candidato morenista
Andrés Herrera/El Heraldo de Puebla
Miguel Barbosa Huerta resaltó que en su gestión como gobernador se acabará esa vieja cultura de la adoración al poder, pues ello ha provocado desconfianza hacia las autoridades, incluso por las que votaron, ya que se vuelven arrogantes y engreídas. “Yo seré un gobernador que rompa esa distancia entre el ejercicio del poder y la sociedad”, dijo.
Barbosa Huerta destacó que al poder hay que respetarlo, pero este a su vez debe cumplir con sus encargos, como es el respeto absoluto a la ley y a sus gobernados, por lo que aseguró que al gobierno llegará un hombre que sueña, anhela y sufre como cualquier poblano.
Luego lamentó que muchos pueblos del estado estén sufriendo pobreza y marginación por el olvido de gobiernos panistas morenogalicistas que dieron importancia a obras faraónicas que de nada sirven, por lo que se comprometió que en su administración será aliado de las autoridades municipales sin importar su origen político o de partido, ya que en su preferencia, están los ciudadanos a quienes hace un llamado de unificador.
El candidato de la coalición Juntos Haremos Historia con Morena, PT y Verde Ecologista (PVEM) al gobierno de Puebla, dijo sentirse dolido por la situación que viven miles de habitantes por el olvido en que han estado y cuya realidad es la pobreza y la marginación como una constante.
“Ellos viven en tierras fértiles, pero siembre abandonados por los gobiernos , yo quiero ser un aliado de las administraciones municipales, independientemente del origen que los haya postulado, ya que no tengo ninguna visión de preferir a nadie, porque veo por los ciudadanos y entiendo el papel de jugar en este momento en Puebla, de unificador”, detalló en su discurso desde Hueytamalco, en donde estuvo ayer en su peregrinar político y de contacto directo con la gente.
Ante cientos de hombres y mujeres, que se dieron cita en el zócalo de esta comunidad, Barbosa Huerta dijo que está decidido a impulsar las actividades productivas en todas las regiones de la entidad, para mejorar la economía y forma de vida de las familias campesinas.
En su discurso, destacó que se debe acabar la vieja cultura de adoración del viejo poder, “al poder hay que respetarlo, pero el poder tiene que respetar, cumpliendo con su deber, con sus encargos y con la ley, el primero que tiene que cumplir para hacerla cumplir es el poder, llámenme Miguel cuando sea gobernador, esa es la cultura en la que estoy formado”.
Aseguró, que conoce todas las regiones del estado y por lo tanto, no va a ser un gobernador perfumado, “como en lugares sencillos, tortillitas y platillos sencillos, por lo que necesitamos que el campo se vuelva la empresa más importante, el lugar donde la gente viva, porque aquí están sus raíces, y para eso, los gobiernos necesitan apoyar a los campesinos, volverlos productores con créditos, y proceso de apoyo en la cadena productiva en lo que son las cosechas desde su cultivo hasta su comercialización”.