El derbi sevillano entre Sevilla y Betis servirá de punto de partida en el regreso de LaLiga. Un día antes regresará la Segunda división con los 45 minutos pendientes del Rayo-Albacete. Eso sí, lo que resta de partido se jugará con la antigua normativa: 3 cambios y 18 convocados. El nuevo fútbol llegará sin aficionados en las gradas, con estadios nuevos (Alfredo di Stéfano y La Nucía), pero con menos normas nuevas de las que se iba hablando durante estos tres meses sin competencia. La Bundesliga ha dejado un rastro preciso de lo que habrá por delante en el nuevo fútbol que arranca esta semana.
Lo más llamativo, pese a que no está siendo utilizado por todos los entrenadores del campeonato alemán, es la posibilidad de realizar cinco cambios. Con tan solo tres ventanas para poder hacer las sustituciones, los entrenadores no dan con la tecla para encontrar la fórmula. En la última jornada en la Bundesliga hasta ocho equipos se inclinaron por hacer cuatro cambios, por siete entrenadores que sí completaron el cupo de sustituciones.
Lo que sí han utilizado todos los entrenadores es ampliar el banquillo hasta los 23 autorizados o todos los disponibles para cada partido. Convocatoria estilo Copa del Mundo o Eurocopa. Más variedad para los entrenadores a la hora de mover al once que está sobre el terreno de juego.
Los árbitros, lejos de lo que se llegó a afirmar, no van a amonestar si algún jugador llega a escupir, algo muy habitual en los futbolistas y que tal y como se ha visto en la Bundesliga, ha dejado de ser algo tan común sobre el verde. En España lo tiene claro y aunque el reglamento puede llegar a contemplarlo, no van a mostrar amonestación alguna.
La otra idea que sobrevoló por redacciones de medios de comunicación y de algún dirigente, es lo de sancionar los posibles abrazos era lo de mostrar amarilla por celebrar un gol con el, hasta el pasado mes de marzo, habitual abrazo grupal. El Comité Técnico de Árbitros lo tiene claro y no sancionará esa actitud de los jugadores, que como se ha visto en la Bundesliga estarán separados en el banquillo, guardando la distancia de seguridad. En algunos entrenamientos, los jugadores ya han celebrado éxitos en los partidillos con fotos de grupo, con algún que otro abrazo.
El sorteo y el pasillo previo al inicio de los partido, se llevarán a cabo sin el pasamanos que ya forma parte de cualquier partido. No habrá apretón de manos entre árbitros y capitanes en los momentos previos al inicio del partido