Un autogol en el último minuto del belga Toby Alderweireld proporcionó la victoria al Liverpool ante el Tottenham (2-1), que recuperó el liderato de la Premier que provisionalmente le había arrebatado el Manchester City.
Fue en una acción complicada y con el egipcio Mohamed Salah, con el que nació la jugada, en posible fuera de juego. Y cuando peor estaba el cuadro de Jurgen Klopp, excesivamente presionado por la necesidad de sumar los tres puntos para no dejar en Anfield el primer puesto de la tabla.
El Liverpool fue superior al principio. Y eso le llevó a adquirir ventaja al cuarto de hora cuando un centro de Andy Robertson fue perfectamente rematado al fondo de la red por el brasileño Roberto Firmino.
Poco a poco el conjunto local perdía fuerza mientras crecía el Tottenham. Mauricio Pochettino dio entrada al coreano Son Heung-Min, que ocupó el puesto del colombiano Davinson Sánchez.
En el 70′, empataron los Spurs en una jugada que nació en una falta sacada por el danés Christian Eriksen y que fue luego el que asistió al brasileño Lucas Moura, que batió a su compatriota Alisson para establecer la igualada.
Pudo obtener el triunfo el Tottenham, superior en el tramo final. Careció de acierto y de la suerte que acompañó al equipo de Klopp en el último minuto. Un balón de cabeza de Salah contó con la indecisión del meta Hugo Lloris y la infortuna de Alderweireld, que llevó la pelota a su propia portería.
La victoria sufrida da aire al Liverpool, líder de la tabla, y aprieta la lucha por los puestos de Champions League. El Tottenham, tercero, tiene 61 puntos. Igual que el Manchester United y sólo uno más que el Arsenal.